Existen una serie de resultados generales de aprendizaje, que se exponen de forma descendente (de más genéricos a más concretos):
1. Desarrollo de la capacidad de trabajo constante, sistemático, organizado, progresivo, independiente y autónomo siguiendo las orientaciones de esta asignatura, así como (en su caso) las orientaciones del tutor.
2. Potenciación de la capacidad de aplicación de la teoría a la práctica.
3. Desarrollo de la capacidad de síntesis de los contenidos y de reflexión sobre estos.
4. Desarrollo de la autoconsciencia del propio proceso formativo y de la capacidad de autoevaluación.
5. Potenciación del respeto mutuo y de la pluralidad de opiniones.
6. Toma de conciencia de la importancia del inglés como lingua franca en la comunicación especializada.
7. Conocimiento de las diferencias entre el inglés general y el inglés especializado.
8. Familiarización con la terminología propia del Inglés Profesional y Académico (IPA), ESP (English for Specific Purposes), Lingüística Textual, Análisis del Discurso, Estilística y otros ámbitos de conocimiento relacionados con la descripción y análisis de textos de especialidad.
9. Estudio de los rasgos característicos o peculiaridades de los textos jurídicos y económico-comerciales, así como desarrollo de la capacidad de identificación de estos en textos o en fragmentos de textos.
10. Estudio y adquisición de vocabulario en inglés de los dos ámbitos de especialidad de la asignatura (jurídico y económico-comercial). En el caso del inglés jurídico, se aprenderán las diferencias entre los llamados sistemas de derecho común y sistemas de derecho civil.

Este listado de resultados generales no es cerrado, pues existen resultados de aprendizaje muy concretos que es imposible reflejar por completo en un listado breve.
Es especialmente relevante que los alumnos sean capaces de utilizar de forma precisa la terminología específica de cada ámbito estudiado, lo cual se tendrá en cuenta en la evaluación de esta materia.