Ninguno

Se tendrán en cuenta los informes tutoriales prescriptivos, siempre que sean enviados al equipo docente antes de la celebración de las pruebas presenciales, especialmente las calificaciones de la evaluación continua de cada alumno.

Con respecto a los criterios de evaluación de la prueba presencial, en la primera parte, es decir, en el desarrollo temático, se tendrá en cuenta la argumentación precisa y razonada de la temática propuesta.

En relación con la segunda parte, es decir, del comentario del texto filosófico extraído de alguno de los incluidos en el texto básico de esta asignatura, se valorará que el comentario realizado esté estructurado, contextualizado con corrección y rigor en el marco en el que se inscribe (obra, autor, filosofía del mismo, corriente filosófica actual a la que pertenece y pensamiento propio en relación con el mismo).

El examen consistirá en una prueba presencial, a realizar en el Centro Asociado en el que esté matriculado el alumno. Tendrá una duración de dos horas y, durante ella, el estudiante no podrá disponer de ningún material. Su corrección correrá a cargo del equipo docente.

El examen constará de dos partes, ambas imprescindibles para adquirir las competencias esperadas en esta materia:

El desarrollo de un tema o subtema del programa de esta asignatura. Se tendrán en cuenta los conocimientos adquiridos en relación con su aplicación a los textos filosóficos, su exposición clara y razonada, en un discurso preciso y articulado –no en un esquema- que muestre su comprensión del vocabulario y los conceptos filosóficos propios de cada autor y de la corriente a la que se adscribe.

La aplicación de sus conocimientos a un comentario (a elegir entre dos propuestos) de cualquiera de los pasajes de los autores, recogido y comentado en el texto básico de la asignatura. La calificación de este examen supondrá el 90% de la nota final.

De ella se encargarán los profesores tutores, bien en sus clases presenciales, bien a través de los distintos medios que la UNED ha implementado para ello. Consistirá en la confrontación de los conocimientos adquiridos en cada uno de los temas y de sus apartados, una vez solventadas las dudas que impidan la prosecución de los mismos, con los textos de los diversos filósofos que los ilustran. Una vez hecho esto y estudiados los contenidos básicos de esta asignatura, empleando la metodología a la que nos hemos referido, el alumno que decida realizar esta evaluación, deberá ponerse en contacto con su tutor antes del 15 de Diciembre para comunicarle su intención, recibir el asesoramiento oportuno y elegir conjuntamente tres fragmentos de diferentes autores sobre los que versarán sus comentarios. Esta evaluación tiene carácter optativo y podrá suponer hasta un 10% de la calificación final.

Serán corregidos y calificados por los profesores tutores a través de la plataforma alf. Con las pruebas corregidas, el estudiante recibirá información sobre su proceso de aprendizaje y sus posibles deficiencias, ya que el profesor tutor le indicará aciertos, errores o cualquier otra observación conveniente. Ello contribuirá a mejorar su motivación, mostrándole sus avances, a la vez que le facilitará el desarrollo de su autoevaluación y el conocimiento más profundo de la materia. Por todo ello, aunque esta evaluación tiene carácter voluntario, se aconseja su realización.

Existen en el mercado algunas antologías de textos filosóficos comentados, pero pertenecen a los distintos periodos de la historia de la filosofía, por lo que no siempre resultarán adecuados para esta asignatura y/o para el último curso del Grado en Filosofía. También se pueden encontrar recomendaciones diversas sobre como encarar un comentario de esta índole. El libro de texto básico ya los introduce, los contextualiza y extrae ciertas conclusiones de ellos. Lo importante, sin embargo es practicar continuamente, interpretar textos filosóficos. Al fin y al cabo, tanto en la docencia como en la investigación, el actual discente va a tener que aplicar sus conocimientos filosóficos a los textos en los que éstos se plasman e incitar a los que le rodean –bien sean alumnos, bien colegas- a que realicen sus propios comentarios filosóficos y los contrasten argumentativamente con los suyos.

Sería de gran ayuda emplear las tutorías en esta práctica indispensable. El alumno podría ir desarrollando los fragmentos que considere y en sus reuniones tutoriales se le indicarían posibles mejoras, etc. Aunque esto no sea factible, dado que el alumno ya está de algún modo entrenado en esta práctica, pues está acabando su graduación, es capaz por sí mismo de leer detenidamente los fragmentos y comprenderlos haciendo uso de todos los medios y recursos aquí descritos. A modo de recordatorio, no obstante, digamos que un buen comentario de texto no debe olvidar tratar, aunque sea mínimamente, los siguientes aspectos:

1 Aclaración del significado que los términos claves del texto tienen para su autor.

2 Contextualización del texto (en el momento histórico-cultural y los problemas que tienen lugar en él y que pudieron determinar el texto, en la obra en la que está inserto y en el lugar concreto que ocupa en ella, en la producción completa del autor/a, es decir, en la evolución de su sistema filosófico –si es que lo tuvo- o de su pensamiento, etc.) para comprender el alcance de todo su sentido de un modo más global.

3.- Antecedentes y consecuentes. Es decir, alusión, si el texto se presta a ello, de la herencia o tradición que recoge, reformula o critica, así como de la escuela, corriente o movimiento a los que inspira. Esto último, es decir, la influencia ejercida por el texto y el autor resulta difícil en esta asignatura de filosofía contemporánea, pero no imposible, ya que estudiamos las primeras de las Corrientes actuales del pensamiento y, además, justamente como enclaves de las venideras.

4.- Distanciación y valoración crítica. Aunque éste sea el último punto, es indispensable para evaluar la madurez y la capacidad de pensar por sí mismo del comentarista. Se pretende que, una vez leído y analizado a fondo el fragmento, evalúe muy sucintamente cada uno de los tres apartados precedentes. Debe incluir, asimismo, la propia opinión fundamentada, la de otros citada y con expresión de un juicio propio al respecto, así como la aplicación (no extrapolación) razonada a cuestiones actuales de interés personal y/o general.

Estructuración del comentario de texto de acuerdo con la descripción anterior.

Rigor y corrección en todos sus puntos y contenidos, así como del discurso y su adecuación con los contenidos.

Establecimiento de relaciones razonadas con otras corrientes y/o filosofías.

A pesar de su carácter voluntario, es muy recomendable que el alumno realice las actividades de la evaluación continua en sus Centros y, sobre todo, que las ejercite mientras estudia y aclarando sus dudas de contenidos, bien con sus tutores, bien con el equipo docente en el foro dispuesto para este fin. Ellas son una preparación indispensable para desarrollar las competencias generales del Grado en Filosofía y, particularmente las de esta asignatura. La constancia en este ejercicio unida a la del estudio del texto básico, le permitirá alcanzar óptimos resultados en la evaluación final.

Aproximadamente 90% la calificación del examen y 10% PECs