La Contabilidad, aún siendo una disciplina con vocación esencialmente práctica, se asienta sobre un conjunto de postulados, hipótesis, principios y conceptos -no demasiado numerosos-, cuya adecuada comprensión es esencial. Sólo conociendo este marco conceptual podrá evitarse la rutina, la ambigüedad y el misterio que con tanta frecuencia acompañan el estudio de esta disciplina.
Una vez hecha la advertencia anterior, es necesario añadir -aunque a primera vista pueda parecer contradictorio- que la mejor forma de asimilar aquellos conceptos es mediante la resolución razonada de ejercicios, supuestos y casos prácticos, esto es, siguiendo un procedimiento similar al empleado para el estudio de las matemáticas. Las consideraciones anteriores marcan por sí mismas las pautas que han de seguirse en el proceso de aprendizaje de cada uno de los capítulos en que se divide el programa de la asignatura, que podríamos resumir en la siguiente secuencia:
Estudie el material que desarrolla cada uno de los capítulos, elaborado con un enfoque teórico-práctico.
Conteste al Cuestionario tipo test que se plantea al final de cada capítulo.
Resuelva los Casos prácticos que se proponen a continuación del cuestionario. (En un primer repaso no es preciso que resuelva todos los casos prácticos. Como éstos aparecen ordenados de menor a mayor grado de dificultad, puede reservar los últimos para un posterior o posteriores repasos.)
ACTIVIDADES FORMATIVAS (FT = Formación Teórica; FP = Formación Práctica;y, Dedicación estimada en %)
Trabajo con contenidos teóricos. FT = 25%; FP = 20%.
Realización de actividades prácticas. FT = 15%; FP = 20%.
Trabajo autónomo (estudio de contenidos, realización de ejercicios, preparación PP.PP., etc.). FT = 60%; FP = 60%.