No se permite ningún tipo de material.

La prueba presencial (examen) está dividida en tres partes, (I) doce preguntas cortas, (II) un tema a desarrollar a elegir entre dos propuestos, cuya extensión máxima de tres caras de folio y (III) un comentario de texto dirigido, que se compone de varias preguntas concretas que se han de contestar tras la lectura del texto, y que por lo tanto no requiere de una preparación específica por parte del alumno.

Para el equipo docente el examen es un lugar de encuentro entre su legítimo objetivo de aprobar y el nuestro –no menos legítimo– de que lo hagan consiguiendo una adecuada comprensión de este periodo de la historia de España. Así pretendemos cumplir nuestra aspiración mediante la preparación que van a tener que hacer de la prueba en sus casas, al tener que elaborar algunos temas.

I PARTE:

En primer lugar se proponen doce preguntas cortas correspondientes a conceptos fundamentales de la asignatura. Cada una de ellas supondrá 0,25 puntos: 3 en total. Sin embargo para seguir corrigiendo el examen –y aprobar– será necesario acertar al menos la mitad de ellas: 6. En caso contrario –acumulando al menos 7 fallos o preguntas sin contestar– el examen será calificado como NO APTO. Las preguntas estarán formuladas de una forma clara de tal forma que sólo pueda acertarse o fallar. Las mismas podrán ser de elección entre varias alternativas, de ordenar determinados acontecimientos o consistir en una respuesta breve de una o pocas palabras, pero en cualquier caso estarán formuladas de una forma clara y directa, sin jugar a confundir con su enunciado. Además, todas las respuestas a las preguntas estarán contenida en el manual recomendado, y es posible que algunas también tengan que ver con las preguntas de desarrollo.

No se tratará de preguntas rebuscadas, sino que se corresponderán a contenidos que entendemos que deben ser asimilados y manejados inexcusablemente por un graduado en Historia. Admitiendo la posibilidad del error precipitado y del descuido, y aun concediendo cierto margen, entendemos que fallando la mitad no se puede superar la asignatura.

Las preguntas cortas se deben preparar mediante la lectura pausada de los contenidos del programa, tratando de interiorizar los aspectos más relevantes.

II PARTE:

En segundo lugar la pregunta (o tema) de desarrollo –a elegir entre dos propuestas– será puntuada hasta con 5 puntos, en un espacio tasado máximo de 3 páginas o caras de folio, de ahí su importancia. La pregunta de desarrollo tratará de medir la capacidad de preparar y desarrollar un tema, de ahí que se deba preparar con la bibliografía de la asignatura y los ítems de evaluación vienen expresados en la siguiente tabla:

El equipo docente podrá calibrar con decimales las situaciones intermedias.

En cuanto a la extensión, pedimos tres caras de folio para evitar introducciones innecesarias o secundarias, y que ustedes se centren de lleno en el tema. Pasarse unas líneas en la extensión no supone el suspenso automático, ni nada de eso, si bien nunca contaremos de cara a la nota elementos expuestos que no tengan nada que ver con el tema que se pregunta. En situaciones especiales en los que haya alumnos con letra demasiado grande se admitirá que sobrepasen dicha extensión de dos caras de folio, si bien se ruega a la mayoría que se atenga al espacio tasado como un ejercicio de síntesis de contenidos. El motivo básico de este tipo de desarrollo dentro del examen es para potenciar la capacidad crítica del alumnado, y que no se queden sólo con lo que un manual dice.

III PARTE:

Por último el enunciado del examen incluirá un comentario de texto que será elegido por el Equipo Docente en base de la propia importancia del texto para la asignatura. Ustedes deberán realizar dicho comentario de texto, basado en preguntas cortas, en el espacio tasado en el propio examen. El examen dará las indicaciones necesarias para realizar el ejercicio que se pide –valorado con 2 puntos–, que no tendrá porque ser un comentario de texto completo, al estar basado en preguntas sugeridas por el equipo docente. Algo que hace que el alumnado no tenga que realizar una preparación especifica para dicha prueba, pero que a su vez se familiarice con los textos producidos en la época.

Existe una única prueba de evaluación continua, que consiste en la realización de dos ensayos, y la realización de un breve resumen. Cada ensayo debe contestarte en un espacio máximo de 2 páginas. Lo que se pretende es que los alumnos/as lean y consulten cualquier tipo de material que deseen para contestar, siempre que éste sea riguroso, para que así puedan contestar críticamente a una pregunta que se sugiere, razonando su respuesta. De lo que se trata es demostrar la capacidad de indagar sobre un hecho concreto y luego razonar sobre las cosas que se han leído. Se valorará especialmente la forma de razonar a las preguntas propuestas, y la capacidad crítica, debiendo realizar una redacción coherente. No se trata –ni se permite–, copiar y pegar nada de internet, de ahí ese formato de pregunta. Se valorará el aporte personal, y que en la redacción los alumnos demuestren haber interiorizado y comprendido la materia.

La nota final se obtiene de la suma de la nota obtenida en el examen (90% de la nota final) y de la obtenida a través de la realización  de las PEC (10% de la nota). Si no se realiza la PEC, el examen será el 100% de la nota. La calificación de la PEC se aplicará de la siguiente manera, siempre y cuando el examen esté aprobado:

- A la nota del examen se sumará 1 punto si se ha obtenido en la PEC un sobresaliente.

- Se sumará un 0,75 si se ha calificado la PEC con un notable.

- Se sumará 0,5 puntos si se ha calificado la PEC con un aprobado.