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HISTORIA GENERAL DE LA CIENCIA II

Curso 2022/2023 Subject code70012051

HISTORIA GENERAL DE LA CIENCIA II

METODOLOGÍA

Esta asignatura será impartida sobre la base de dos elementos, complementarios en la metodología del aprendizaje. Primero, para el núcleo de los contenidos se utilizará material impreso disponible en el mercado editorial, en concreto un texto que se detalla en la bibliografía básica de esta Guía; este texto se utilizará de forma compartida en las asignaturas Historia General de la Ciencia II y Aspectos de la Ciencia Contemporánea. Segundo, para la parte del contacto directo con los estudiantes (ampliaciones bibliográficas, aclaración de puntos concretos del Programa, actividades individuales, o cualquier otro tipo de consulta o contacto) se recurrirá a la vía virtual, en la que los apartados del “Foro de la asignatura” y el “Correo electrónico” prestarán una ayuda inestimable. Dicho esto, se recomienda seguir las siguientes orientaciones en el estudio de la asignatura.

1. Orientaciones generales

El libro recomendado como manual constituye una Historia de la Ciencia autosufiente, por lo que no será preciso recurrir a otra bibliografía. Con esto se quiere decir también que incorpora los datos y fechas que se consideran pertinentes en una historia de este tipo. Ahora bien, en principio, para el estudio de la asignatura, no será necesario conocer todas las fechas y todos los nombres. En principio, sólo se deberán recordar los nombres de los principales científicos y las fechas aproximadas –por ejemplo, en términos de decenios, o de cuartos o tercios de siglo- de los principales acontecimientos. En todo caso, en los exámenes nunca serán objeto de una pregunta directa.

Lo que se considera importante a la hora de estudiar la asignatura son los problemas a los que se enfrentan las distintas disciplinas científicas , las respuestas que se les dieron y, a su vez, los nuevos problemas a los que estas respuestas dieron lugar. También a cuestiones tales como las principales líneas de investigación en una época determinada y, desde luego, a la comprensión de los distintos conceptos implicados en la formulación de las distintas teorías. Resumiendo: La comprensión de las teorías, de sus conceptos y de sus problemas desde una perspectiva histórica es central dentro del estudio de la asignatura y debe trabajarse particularmente sobre ello.

Los recuadros que se intercalan en los distintos temas son ilustrativos. En algunos casos se trata de textos históricos, que ayudan a situar los problemas tratados en el texto principal. En otros, se trata de desarrollos matemáticos o de la descripción de experimentos que igualmente buscan ilustrar de qué trataban las distintas disciplinas. El alumno no debe dejarse impresionar por las ecuaciones matemáticas que figuran en algunos de ellos. En ningún caso se le pedirá en el examen que las escriba (ni éstas ni ninguna otra más allá de los casos más elementales que figuran entre los conocimientos que se suponen en una cultura general), aunque en algunos casos destacados –como las ecuaciones de Maxwell o las transformaciones de Lorentz, por ejemplo- sí se le podrá pedir que explique y comente, globalmente, su naturaleza y significado.

2. Orientaciones generales para cada uno de los temas

Cada tema del programa coincide estrictamente con un capítulo del texto base. La asignatura, en concordancia con las divisiones del índice del libro, puede considerarse dividida en dos partes: una relativa al siglo XVIII y otra al siglo XIX, si bien por razones de continuidad histórica esta última termina a comienzos del siglo XX, con la formulación por Einstein de la teoría de la relatividad restringida. (Los contenidos siguientes, correspondientes al siglo XX, serán objeto de estudio más adelante, en una asignatura optativa destinada a los problemas de la ciencia contemporánea.)

La distribución de los temas en ambas partes siguen un esquema común: se abren con un capítulo que podríamos llamar “de contexto” en donde se alude, siquiera brevemente, a las circunstancias institucionales, sociales, económicas, políticas y tecnológicas –dicho en general- de la ciencia del período, y que tanto para los alumnos que opten por los trabajos de evaluación continua como para los que no lo hagan, serán de imprescindible utilidad a la hora de enmarcar el comentario de texto a realizar en los trabajos, en el primer caso, o en el examen final, en el segundo. A continuación vienen los capítulos destinados a las “ciencias duras”, fundamentalmente la física, que son seguidos por los correspondientes a la química y a la historia natural y la biología y geología.

En un segundo nivel, como se observará, cada capítulo del libro se abre con una introducción general, sin epígrafe: esta introducción general sirve de presentación y marca las líneas maestras de lo que se expondrá en el capítulo. A continuación, el capítulo se divide en algunos apartados, marcados en letra negrita. Con frecuencia dichos apartados, de nuevo, se abren con una presentación general de sus contenidos, que luego se desarrolla, en el siguiente nivel, en subapartados, rotulados con letra cursiva. De modo que en la presentación de cada tema se da una jerarquización de los contenidos, a cada uno de cuyos niveles corresponde una presentación general que servirá de orientación para el estudio al centrar las cuestiones que se tratan a continuación dentro del texto.

Por último, los capítulos finalizan con una bibliografía. Opcionalmente, el alumno puede consultarla, si dispone de ella, la adquiere o la encuentra en bibliotecas, con el fin de ampliar los conocimientos adquiridos en el estudio de los distintos temas, o simplemente por el placer de profundizar en temáticas que personalmente le resulten de interés. En todo caso, su presencia debe ser notada, pues expresa la idea básica de que la historia de la ciencia no es una disciplina cerrada, sino que se trata de un área de investigación muy amplia y muy activa, dentro de la cual se publican, entre libros y artículos, varios millares de contribuciones al año, y eso sólo contando con aquéllas más destacadas que recogen las bases de datos internacionales.