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CULTURA Y CIVILIZACIÓN FRANCÓFONAS

Curso 2017/2018 / Cod.23304057

CULTURA Y CIVILIZACIÓN FRANCÓFONAS

PRESENTACIÓN

 

La asignatura de Cultura y civilización francófonas forma parte del bloque de formación específico para el Francés lengua extranjera. Junto con la asignatura denominada El francés profesional, constituye la materia de Complementos para la formación disciplinar. A estas dos asignaturas se añaden las asignaturas de Didáctica de la Lengua extranjera francés y Aplicaciones de las TIC en los estudios franceses, dentro de las materias de Aprendizaje y enseñanza de las materias correspondientes e Innovación docente e iniciación a la investigación educativa, respectivamente. Todas ellas procuran dar al futuro docente de Francés Lengua Extranjera (FLE) la formación específica necesaria para el buen desempeño de su profesión.

El Marco Europeo común de referencia para las lenguas (MECRL) establece que la competencia pluricultural es inseparable de la competencia plurilingüe y forma parte, por lo tanto, del aprendizaje y de la enseñanza de una lengua. Sin el adecuado conocimiento de la cultura y de la civilización que conllevan una lengua extranjera, no es posible hacer frente a los desafíos comunicativos que supone el hecho de vivir en una Europa donde conviven varias lenguas y culturas. El plurilingüismo, dice el MECRL, tiene que contemplarse en el contexto del pluriculturalismo. Uno de los aspectos importantes de una lengua extranjera es el acceso que da a las manifestaciones culturales. Por ello, el MECRL establece que una de las necesidades comunicativas que los Estados de la Unión Europea deben comprometerse a cubrir es: alcanzar una comprensión más amplia y más profunda de la forma de vida, de las formas de pensamiento de otros pueblos y de sus patrimonios culturales. Por otra parte, el preámbulo a la Recomendación (98) 6, aprobada por el Comité de Ministros del Consejo de Europa del 17 de marzo de 1998, reafirma, como uno de los objetivos políticos de sus acciones en el ámbito de las lenguas modernas, el propiciar el entendimiento, la tolerancia y el respeto mutuo respecto a las identidades y a la diversidad cultural por medio de una comunicación internacional más eficaz. Se entiende fácilmente que, para que todo ello se pueda llevar a cabo, hay que hacer del conocimiento de la diversidad cultural una de las prioridades de la enseñanza de una lengua extranjera. No es posible desarrollar una competencia plurilingüe eficaz sin que la experiencia lingüística de un individuo se expanda también a los entornos culturales de una lengua, desde el uso familiar y profesional, hasta la sociedad en general.

Esta asignatura contribuye a la adquisición de las competencias generales del individuo y sobre todo de la competencia existencial (saber ser), por su relación con los malentendidos culturales, fuente frecuente de conflicto en las relaciones humanas. En el mismo orden de ideas, favorece el conocimiento de los valores y las creencias compartidas por grupos sociales de otros países y regiones (por ejemplo el valor del trabajo, las creencias religiosas, la historia común asumida, etc.).

Nuestra asignatura contribuye, asimismo, a la adquisición de las competencias lingüísticas, ya que es sabido que la organización cognitiva del vocabulario y el almacenamiento de expresiones dependen, entre otras cosas, de las características culturales de una comunidad.

Igualmente, su aportación es fundamental para la adquisición de las competencias sociolingüísticas que se refieren, precisamente, a las condiciones socioculturales de uso de una lengua.

 Y no puede pasarse por alto el gran impacto que ejercen las interacciones y los entornos culturales sobre las competencias pragmáticas del individuo.

 El objetivo último al que quiere contribuir esta asignatura es participar activamente a producir una competencia pluricultural enriquecida e integrada, en interacción con la competencia plurilingüística.

En relación con las demás asignaturas del Bloque de formación específico: aprovecha competencias sociolingüísticas y pragmáticas preexistentes, que a su vez desarrolla más; produce una mejor percepción de lo general y de lo específico de la organización lingüística de la lengua francesa; dada su naturaleza, perfecciona el conocimiento de cómo aprender y la capacidad de entablar relaciones con otras personas y situaciones nuevas.