La asignatura Desarrollo y Cooperación Internacional consta de 15 créditos, tiene carácter optativo y se imparte en el segundo semestre del Máster.
Está compuesta por los siguientes bloques temáticos:
Desarrollo Humano, Desigualdades y Pobreza
El Sistema Internacional de Cooperación para el Desarrollo: Agenda, Intrumentos y Actores
La empresa como actor de desarrollo y cooperación
El concepto de Desarrollo ha evolucionado en el tiempo y también las teorías que lo soportan. Desde una visión más economicista basada principalmente en el crecimiento del PI, hemos pasado a un visión más humana o sostenible donde se tienen en cuenta también otros párametros más sociales ligados a la salud, la educación y el medio ambiente y que se resume en los 17 Objetivos de Desarrollo Sotenible (ODS) aprobados por Naciones Unidas (NNUU) en 2015.
La nueva agenda 2030 supone un nuevo marco internacional para los próximos 15 años, un cuestionamiento del modelo de desarrollo de todos los países (también de los ricos) e implica que todos los países deben hacer cambios en su modelo de desarrollo y en los modelos de negocio para avanzar en el logro de los ODS, por lo que las empresas tienen una oportunidad histórica de ser agentes de desarrollo. La RSC se convierte pues en la estrategia de gestión idónea para el logro de los ODS y los ODS en el faro e inspiración para las agendas de los departamentos del RSC.
La Comisión Europea, ya en su Informe de Competitividad 2008, contemplaba la Responsabilidad Social Corporativa como una contribución al desarrollo sostenible y como una estrategia de crecimiento y el enorme potencial que tiene para contribuir a aspectos tales como la cohesión social, la competitividad económica y un uso más racional de los recursos. Con la globalización, el concepto de sectores puramente nacionales ha quedado obsoleto, y se hace necesario contemplar la cadena de valor como un todo, desde la utilización de las infraesctructuras hasta el servicio postventa, pasando naturalmente por la utilización de las materias primas.
Cuando se lanzó el Pacto Mundial, NNUU ya abogaba por una Cooperación Internacional al Desarrollo (CID) donde la colaboración entre la RSC, como elemento de innovación social, y el CID sea menos asistencialista y más estratégica, yendo más allá de la ayuda y buscando la coherencia política.
Esta asigantura pretende facilitar a los estudiantes los fundamentos teóricos del desarrollo y la agenda y mecanismos de cooperación internacional así como el papel relevante que la empresa, a través de su RSC, juega en la lucha contra la pobreza, las desiguladades y el cambio climático, en especial en países con graves problemas estructurales. Estos fundamentos son imprescindibles para alcanzar una perspectiva de la cooperación que, basada en la asociación entre el Norte y el Sur, y lejos de cualquier connotación cargada de asistencialismo o paternalismo, permita una mayor eficacia en los diferentes proyectos de cooperación que se vayan a ejecutar.