La asignatura ofrece un marco de referencia amplio, que permite entender la educación como un fenómeno que hoy, en nuestras sociedades, se produce en la conjunción de las recíprocas influencias entre la familia, la escuela y la comunidad.
Europa ha evolucionado hacia una sociedad y una economía basadas en el conocimiento. Y los profesores se ven afectados en su tarea educadora, tal vez más que nunca, por las problemáticas que se derivan de un mundo social y político complejo, uno de cuyos retos más acuciantes es avanzar hacia un desarrollo sostenible. Estas circunstancias les exigen ser agentes activos para facilitar a sus estudiantes la adquisición de los conocimientos, las competencias, los valores y las actitudes que se precisan para construir sociedades sostenibles y pacíficas, mediante, entre otras, la educación para la ciudadanía mundial y la educación para el desarrollo sostenible
En este marco internacional, los profesores han de contribuir a formar ciudadanos que participen activamente en la sociedad, capaces de aprender a convivir de forma positiva con la diversidad cultural, étnica y lingüística; e, igualmente, preparados para el desempeño profesional.
En la asignatura se abordan explícitamente los contenidos relacionados con este planteamiento.