Es una asignatura de contenido teórico-práctico, que cuenta con 2 créditos ECTS y se imparte en el primer semestre.
Está diseñada para facilitar al estudiante el desarrollo de las competencias necesarias para gestionar la información de manera autónoma y autorregulada.
La asignatura tiene como propósito que el estudiante adquiera una comprensión sólida del proceso de búsqueda, evaluación y uso de la información científica, haciendo hincapié en el marco legal y ético en que se produce y usa esta información. Además, se fomentará una actitud crítica que permita una evaluación cualitativa de las fuentes de información, con el objetivo de incorporar la información más pertinente y fiable al trabajo de investigación.
En ella trataremos de conocer todas aquellas herramientas tecnológicas relacionadas con la información que resultan imprescindibles para afrontar una investigación académica de manera eficaz. Junto a las más importantes fuentes de información especializadas, como PsycINFO o Medline, utilizaremos gestores bibliográficos como Mendeley, RefWorks o Zotero, y accederemos a herramientas de evaluación cualitativa de publicaciones como Journal Citation Reports o Scimago Journal Rank.
Esta asignatura guarda una estrecha conexión con todas las restantes del Máster ya que proporciona al estudiante los conocimientos y las competencias imprescindibles para llevar a cabo su investigación y difundir los resultados de la misma.
En un mundo de sobreabundancia informativa, uso masivo de las TICs y cultura de autoservicio, la gestión eficiente de la información se convierte en una ventaja competitiva. La información puede marcar la diferencia en entornos competitivos, razón por la que cualquier investigador debe estar al día de los cambios que se producen en su sector. Tenemos que entender la información como un activo, que hay que refinar para extraer de ella el conocimiento que aporte un valor diferencial a lo que hacemos.
La facilidad para acceder a la información y la gran cantidad de información disponible puede, paradójicamente, ser un problema cuando necesitamos acceder a las mejores fuentes para nuestra investigación. A menudo, los estudiantes tienen dificultad para identificar sus necesidades de información y dedican demasiado tiempo a la búsqueda y recuperación de la misma, obteniendo además resultados poco pertinentes. Tampoco manejan con solvencia las herramientas de gestión de la información ni disponen de criterios definidos para evaluarla, citarla y referenciarla adecuadamente.
Esto repercute en la elaboración de los trabajos del resto de las asignaturas y, especialmente, en la presentación del Trabajo Fin de Máster.
Ser competente en la gestión de la información necesaria para la realización de un trabajo de investigación consiste en un saber hacer complejo. Incluye conocimientos y el desarrollo de habilidades y actitudes para analizar y resolver problemas de modo contextualizado y reflexivo.
Se hace por tanto, imprescindible, adquirir las competencias en el uso y gestión de la información para la realización de trabajos de investigación que aporten nuevo conocimiento y su posterior divulgación científica.
