Investigación y Evaluación Institucional es una asignatura cuyas notas distintivas son, entre otras, las siguientes:

• Sus propuestas y realizaciones se llevan a cabo en el marco institucional, es decir, se centran en el estudio de los problemas que emergen en los quehaceres y funcionamiento de los centros y organizaciones educativas.
• Los actores educativos son quienes asumen el protagonismo de ser sujetos en vez de objetos de indagación, ya sea con su participación activa en los proyectos o asumiendo, por ejemplo, en el caso de los docentes el rol de profesor investigador.
• Sus propósitos prioritarios son contribuir a la generación de un tipo de conocimiento que facilite los procesos de innovación educativa, los proyectos de mejora curricular y organizativa y las actuaciones de desarrollo profesional e institucional.

Las instituciones educativas emergieron, en el último tercio del siglo XX, como un lugar privilegiado de investigación y evaluación para afrontar desafíos tales como el desarrollo institucional, los procesos de cambio, la transformación, innovación y mejora escolar, etc. En cualquiera de estos ámbitos, es innegable que la teoría y práctica de la investigación y evaluación institucional han ido adquiriendo un protagonismo estelar ya sea como base sobre la que sustentar y legitimar las directrices de las políticas educativas que a nivel nacional se ponen en juego; para fundamentar las decisiones que necesitan tomarse en la conducción de los sistemas educativos; o para proveer a los centros y profesores de herramientas y datos que, además de facilitarles el conocimiento de sus quehaceres, les permitan profundizar en sus desarrollos institucional y profesional.

Tomando en consideración todas estas potencialidades, aunque nos centraremos en la última de ellas,  asumimos que la institución educativa es el eje en torno al cual se vertebran los procesos de cambio e innovación escolares. Y será precisamente a través de la implementación de procesos de investigación y evaluación como las instituciones y su profesorado podrán avanzar en la generación de un conocimiento que fundamente sus quehaceres profesionales e institucionales.