“Diseñamos un programa pensando tanto en profesionales de la Psicología como en los artistas, creadores, intérpretes, directores, coreógrafos, bailarines, músicos y estudiantes y profesores de cualquiera de las Artes escénicas, tanto cine, teatro, danza, música como circo. Pero los inscritos han sido mayoritariamente profesores de conservatorios y escuelas y psicólogos especialistas en bienestar”, explica la profesora Pérez Llantada. “Nos ha sorprendido gratamente el éxito de la convocatoria, con 198 inscritos y eso que las normas sanitarias nos obligan a ofrecer un aforo presencial muy limitado y la mayoría están asistiendo en línea”.
Durante tres días se sucederán presentaciones, conferencias plenarias y talleres que abarcarán las técnicas psicológicas más punteras, aplicables a la mejora de las actividades de las artes escénicas. “Tratamos de amalgamar todo lo que necesita un artista profesional o amateur antes, durante y después de su aparición en el escenario. Les dotamos de herramientas para que disfruten la experiencia: cómo controlar el miedo escénico; técnicas de relajación; habilidades en las relaciones interactivas con el público, durante la promoción de las obras, por ejemplo; o herramientas para mejorar la memoria, importante a la hora de aprender textos, interiorizar pasos de baile o ejecutar un pentagrama”.
Agenda apretada y ponencias bilingües
Los tres días del Congreso Internacional de Psicología y Artes Escénicas presentan una agenda apretada de presentaciones, talleres y mesas redondas multidisciplinares en las que se trabaja en técnicas de atención, de concentración, comunicación no verbal, coaching… Como muestra, las conferencias plenarias: Psicología del alto rendimiento: Deporte y Artes escénicas, de José María Buceta Fernández; Expresiones faciales o el alma delatada, de Enrique García Fernández-Abascal; y Creatividad artística y científica: una profunda unión, de Manuela Romo Santos.
