Paqui Calle, alumna habitual de los cursos de verano en Mérida
Este año la UNED pone en marcha los XIX Curso de Verano. La oferta, como casi todos los años, es variada, interdisciplinar y la calidad, como bien puso de relieve el rector, indiscutible... Mas lo que nos convoca aquí y ahora es el por qué, profesionales de distintas ramas, estudiantes de disciplinas dispares y en periodo vacacional, cumplimos con el ritual de dedicar horas y días del duro verano emeritense a ese noble arte de aprender.
La UNED de Mérida nos brinda cada año el gustazo de escuchar a personas de trayectoria intelectual nacional e internacional indiscutible; y las personas encandiladas con esto que llamamos cultura copamos las aulas en un intento de no perder nada de lo que allí se diga; nuestros intereses se funden con los relatos que nos dan, nuestras motivaciones encuentran el cobijo preciso en los conocimientos que se abren a todos y la vida se ubica en el lugar justo: el pensamiento.
Sabemos que el futuro estará marcado, casi en todos los ámbitos, por el conocimiento, y este mañana de un pueblo sólo será posible por ese afán de saber que la ciudadanía ejerza cotidianamente. Ésta es la razón que avala que cada año repitamos en los Curso de Verano, que cada año esperemos más palabras, más ideas, más debates, más diálogos, ésta es la razón que pueda avalar que nuestro futuro individual, y, por ende, social sea mejor.
Como siempre es deseable la crítica, me permitiré aventurar alguna idea para el próximo verano: sería aconsejable que las principales entidades culturales e instituciones de la ciudad pusieran en marcha un ciclo de conferencias durante todo el mes de julio como colofón a los cursos de verano. Aprovecharé las palabras que el Alcalde de Mérida dijo en la presentación de los mismos y le sugeriré que, dada la pésima oferta cinematográfica de nuestra ciudad, tal vez durante el mes de julio la Filmoteca de Extremadura y Cine Forum podrían programar ciclos de cine, completando de esta manera una oferta cultural de mayor calidad .