Comentario: Los autores evitan la moderna tendencia a considerar al "individuo" como la fuente primordial de problemas y soluciones y, en cambio, destacan la importancia de la comunidad, el trabajo en equipo y la colaboración. Desarrollan un marco de referencia que reconoce las dimensiones preventiva y de seguimiento del trabajo social, así como el papel vital que desempeña la respuesta rápida y eficaz a las situaciones de crisis. Describen cómo los trabajadores y trabajadoras sociales pueden abordar los problemas que surgen en el nivel local, colaborando con las personas usuarias de los servicios, los cuidadores, las redes sociales existentes en la comunidad y los profesionales de otras organizaciones, con el fin de alcanzar soluciones sostenibles y el cambio social a largo plazo.