¿Por qué es importante este colgante elaborado con placa de percebe?
Es importante porque hasta la fecha no se han encontrado en todo el Paleolítico superior colgantes realizados sobre ese material, que es una placa del extremo de un percebe que, además, debió ser de gran tamaño. En otros yacimientos, ya en épocas más recientes, se han encontrado restos de percebes, pero probablemente fueron utilizados para la alimentación, nunca con huellas de manipulación intencional para servir de colgante.
¿De qué época hablamos?
Con relación al colgante que nos ocupa, estamos hablando del Gravetiense, hace unos 30.000 – 28.500 años antes del presente, en una época mucho más fría que la actual, con la costa a más de 5 km de la línea que hoy conocemos y el nivel del mar unos 120 m más bajo que el que ahora alcanza en la zona de Nerja.
¿Quién utilizaba este tipo de adornos?
El colgante sería utilizado como elemento de prestigio por parte de un integrante de aquel grupo humano que podría tener cierta importancia dentro de él, no sabemos si hombre o mujer. Pero, en cualquier caso debía ser un objeto que llamaba poderosamente la atención en el grupo, puesto que hasta la fecha no hemos encontrado nada parecido en ese momento, ni tampoco en momentos posteriores. Significa que aquellos pobladores que todavía no utilizaban los recursos marinos para su alimentación, sí que los usaban para su adorno corporal, con el riesgo que conlleva su obtención. En esa época también se usaban adornos hechos con pequeños gasterópodos
¿Es el objeto ornamental más antiguo conocido elaborado con este tipo de recurso?
En efecto, en yacimientos más antiguos que Nerja se han encontrado restos de percebes, pero sin evidencias que los señalen como objetos de adorno. Es el caso de Pinnacle Point (Sudáfrica), donde aparece un único resto de hace unos 164.000 años antes del presente, posiblemente introducido de forma accidental.
¿Qué significa este hallazgo para el estudio de nuestros antepasados?
El significado de este hallazgo nos indica que las primeras poblaciones de humanos anatómicamente modernos que habitaron la Costa del Sol ya tenían un pensamiento simbólico bien enraizado en sus costumbres, pues se dotaban de adornos que tenían que obtener en la zona litoral, para lo cual tenían que realizar su procesado posterior con el fin de darles la funcionalidad deseada, cosa que eran capaces de repetir en otros objetos de adorno de los que contamos con una mayor colección (pequeños gasterópodos). Por tanto estamos ante poblaciones con gustos similares a los nuestros, en las que se valoraba el adorno corporal, quizá con un significado que puede estar en relación con la identidad del grupo al que pertenecían, al igual que ocurre actualmente con los adornos que portan diferentes personas y grupos de personas en nuestra sociedad: por ejemplo, nosotros como miembros de la UNED llevamos el pin de nuestra universidad que nos identifica como miembros de ella.
Tengo entendido que este trabajo ha sido publicado en un libro de la Universidad de Wroclav, Polonia. ¿Qué supone esto para vosotros?
Sí, el trabajo ha salido publicado en una monografía de la Universidad de Wroclav (Polonia) con el sugestivo título de Written in bones, en la que se plasman las contribuciones presentadas en la 7ª Reunión del Working Bones Research Group, que tuvo lugar en septiembre de 2009 en el Archaeological Institute de la Universidad de Wroclaw, donde lo presentó Bárbara Avezuela Aristu, que realiza su tesis doctoral sobre los elementos de adorno de los cazadores-recolectores y pescadores del Paleolítico superior de la península ibérica, incluyendo el yacimiento de Nerja. Para nuestro grupo de investigación supone un reconocimiento internacional de la investigación que hemos desarrollado en los últimos años sobre los recursos marinos utilizados por los habitantes de la Cueva de Nerja. Es algo que nos anima a seguir investigando y publicando en esa línea.