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Universidad, Innovación y Sostenibilidad | ||
La importancia del Consejo Social de las Universidades, viene reconocida en el Título III de la Ley Orgánica 6/2001, como “un órgano de participación de la sociedad en las universidades”. Al Consejo Social de la UNED le corresponde, entre otras competencias, la supervisión de las actividades de carácter económico de la Universidad y del rendimiento de sus servicios. Promover la colaboración de la sociedad en la financiación de la Universidad y las relaciones con su entorno cultural, profesional, económico y social al servicio de la calidad de la actividad universitaria, o aprobar las cuentas anuales de la universidad y de las entidades que de ella puedan depender. | ||
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Este foro virtual pretende ser un “think tank” que actue de nexo entre dos jornadas presenciales, la ya celebrada en enero de 2012 y la que tendrá lugar durante el próximo mes de mayo de 2013, cuya hoja de ruta se diseñará en base a las aportaciones surgidas del mismo. César Alierta, Presidente del Consejo Social de la UNED y Presidente Ejecutivo de Telefónica S.A., que considera un binomio inseparable la relación Universidad – Empresa, “como herramienta de incalculable valor para desarrollar y profundizar en este vínculo, especialmente importante para nuestro mercado laboral” expone los planteamientos que sugieren la necesidad de un cambio en el modelo productivo. | ||
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De hecho, la globalización está siendo una de las principales palancas para la recuperación económica, que ya estamos empezando a vislumbrar. | ||
P.- Como Presidente del Consejo Social de la UNED es un privilegiado conocedor de la realidad universidad – empresa. ¿Se produce una optimización de recursos equilibrada entre ambas organizaciones? En otras palabras, ¿se gestionan adecuadamente los activos intangibles del capital intelectual? Respuesta.- En España se ha avanzado mucho en este camino, pero creo indispensable hacer un esfuerzo aún mayor. La relación entre el mundo universitario y el empresarial debe convertirse en un elemento capital del nuevo modelo productivo. La universidad es un elemento clave por su capacidad de investigación e innovación y hay que conseguir fomentar e impulsar esas capacidades para que sus efectos se trasladen al ámbito empresarial. Si algo nos va a definir como sociedad en un futuro próximo y nos va a diferenciar dentro de un mundo cada vez más global y competitivo, es la calidad en la formación de nuestros profesionales. A este respecto, las empresas no podemos encontrar mejores aliados que las universidades de calidad, de donde va a salir el talento que hará posible la transformación de la que hablábamos. En España tenemos la suerte de contar con centros formativos de altísima calidad y creo que no tenemos nada que envidiar en este sentido a otros países. P.- A las universidades se les suele reprochar desde el mundo empresarial, en muchas ocasiones, una cierta distorsión entre sus planes formativos y la realidad y necesidades de los mercados en que compiten las empresas. Además de la Presidencia del Consejo Social de la UNED, Vd. mantiene una vinculación con el mundo de la formación empresarial como miembro del Board of Overseers de la Columbia Business School. ¿Se puede abordar un Cambio del Modelo Productivo sin corregir estas distorsiones? ¿Qué aportaciones concretas pueden realizar las empresas para ayudar a corregir estas desviaciones, afinando en la orientación de los planes formativos? Respuesta.- Sinceramente creo que la conexión entre Universidad y Empresa es cada vez mayor y más fluida. Debemos profundizar en la creación de espacios comunes en los que universidades y empresas puedan colaborar y poner en común estrategias y visiones que permitan alcanzar una mayor optimización de la gestión del capital humano. No es sólo una labor de universidades y empresas, sino que las políticas implementadas desde la esfera pública deben tener en cuenta este objetivo y ubicarlo en el centro de sus actuaciones. Desde mi punto de vista, una posible área de mejora, es la capacitación tecnológica de la sociedad en su conjunto. Asimismo, es muy importante que el espíritu emprendedor se vea reflejado y fomentado en los planes de estudio, adaptando lo que se enseña a la realidad de las empresas. En este sentido, la creación de redes globales interconectadas entre centros de investigación, universidades y empresas es una herramienta de incalculable valor para desarrollar y profundizar en este vínculo, especialmente importante para nuestro mercado laboral.
Isabel Quiñones | ||
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