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Madrid, septiembre 2013

Investigadores de la UNED buscan prevenir demencias a través de los videojuegos


El aislamiento y la soledad producen deterioro cognitivo, aunque, para combatirlo, el Grupo de Investigación ‘Estudios en Envejecimiento y Enfermedades Neurodegenerativas (SAND Research Group) de la UNED, dirigido por la profesora Soledad Ballesteros, ha participado en un proyecto de investigación financiado por la Comunidad Europea que busca evitar el aislamiento de las personas mayores y conectarlas a través de las nuevas tecnologías de la comunicación (TIC) con familiares, amigos y personas significativas, de cara a prevenir demencias a través de los videojuegos.



Pilar Toril (investigadora), José Manuel Reales (profesor asociado), Soledad Ballesteros (directora de la investigación), Carmen Pita (investigadora) y Antonio Prieto (investigador).

“Existe una fuerte relación inversa entre la fuerza y el número de conexiones sociales y la incidencia del deterioro cognitivo y la demencia entre las personas mayores”, asegura la Catedrática de Psicología Básica Soledad Ballesteros, añadiendo que la investigación en este campo producirá “importantes” resultados en un futuro.

Catedrática de Psicología Básica y directora del Departamento de Psicología Básica II en la UNED, Soledad Ballesteros afirma que el campo de los posibles beneficios del entrenamiento cognitivo y cerebral en las personas mayores es una de las áreas de investigación más activas en estos momentos.

Según la experta, existen resultados experimentales que sugieren la influencia positiva del entrenamiento con videojuegos y la mejora en la realización de estos videojuegos, aunque esto, con ser importante, no lo es todo. “Más importante es poder demostrar que dicho entrenamiento se transfiere a otros procesos cognitivos y actividades de la vida diaria no entrenados”, asevera.

En el proyecto que desarrolla un grupo de siete investigadores, financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad (MINECO), los expertos han encontrado que, después de veinte sesiones de entrenamiento con diez videojuegos cortos sin acción vertiginosa ni violencia, los mayores entrenados mejoraron en la realización de todos los videojuegos. Y lo que es más importante aún, mejoraron su atención, su velocidad de procesamiento de la información, su memoria y también su bienestar.

La investigación está relacionada, en este sentido, con el concepto de plasticidad cerebral y la posibilidad de establecer nuevas conexiones en un cerebro que envejece, dado que hay numerosas evidencias, a partir de estudios realizados con animales, que han mostrado que los sujetos a los que se proporcionaba un ambiente más estimulante y activo experimentaban cambios en sus conexiones cerebrales. En este sentido, el entrenamiento con videojuegos y sus posibles efectos positivos en el envejecimiento saludable es también un área de investigación “muy activa” en la actualidad.


TIC y redes sociales

Aunque el SAND Research Group lleva cuatro años trabajando en el laboratorio de la UNED, los primeros pasos en esta investigación se dieron en el marco del proyecto europeo AGNES –dentro del área Ambient Assistent Living (AAL)-, financiado por la Comisión Europea y que ha finalizado a principios de este 2013, con diez grupos de trabajo, en seis países europeos y con grupos de trabajo en España, Grecia y Suecia, coordinado por el doctor John Waterworth, de la Universidad de Umea (Suecia).

Este proyecto ha permitido conectar, a través de las nuevas tecnologías, a personas que viven solas en poblaciones de diferentes tamaños y combatir el deterioro cognitivo que provoca el aislamiento.

Desde 2011, además, el Ministerio de Economía y Competitividad (MINECO) ha financiado un proyecto denominado ‘Factores compensatorios del envejecimiento cognitivo: El papel de la tecnología del ordenador para reducir el declive cognitivo en el envejecimiento: Un estudio conductual y de neuroimágenes’, que busca establecer y mantener la inclusión social y la implicación cognitiva en personas mayores que viven solas mediante la utilización de la tecnología de la información y la comunicación (TIC) y las redes sociales.

La principal hipótesis de la que partieron los investigadores, tal como adelantaron en el curso de verano de la UNED celebrado en Ávila con el título de ‘Enriquecimiento cognitivo y prevención de demencias’,, fue que la integración social, la conectividad y la estimulación mental -entrenamiento con videojuegos- a través de las nuevas tecnologías promueve la salud mental y cerebral, la independencia y la actividad cognitiva de los mayores.

Con 36 personas inicialmente, distribuidas al azar en dos grupos -experimental o usuarios, y control-, los investigadores han trabajado con mayores voluntarios dispuestos a acudir al laboratorio de la Facultad de Psicología de la UNED una serie de veces a lo largo del tiempo.





Entre otros sistemas, se emplean las nuevas tecnologías para que los participantes en la investigación realicen ejercicios y pruebas cuyo nivel de acierto se presenta, por ejemplo, con un color diferente en lámparas que se utilizan en el proyecto y conectadas a los ordenadores con los que trabajan los mayores, como muestran las instantáneas que han facilitado los investigadores, tomadas en el transcurso de algunas sesiones.

Entre otros sistemas, se emplean las nuevas tecnologías para aportar información a los pacientes como que han recibido información general (luz verde en una lámpara conectada al ordenador), que deben recordar algo, como tomarse una pastilla, por ejemplo (luz azul) o que ha recibido un mensaje urgente (luz roja), tal como muestran las instantáneas que han facilitado los investigadores.

La investigación, no obstante, se constituye en un proceso lento, de modo que siempre lleva un tiempo hasta que los resultados se trasladan a las políticas sanitarias.

Aún así, para Soledad Ballesteros, lo importante es realizar una investigación de calidad que contribuya al avance y a la cimentación del conocimiento, además de que los estudios de estos temas aumenten, porque es señal de que la cuestión interesa a la sociedad.



Hacia una vida libre de enfermedad

No se puede generalizar, pero es un hecho que la población española es una de las más envejecidas del mundo. Además, a medida que se alargan los años de vida, aumenta la probabilidad de padecer enfermedades neurodegenerativas, razón por la que la Unión Europea ha fijado el año 2020 como fecha para aumentar en dos años la vida libre de enfermedad.

Los países más desarrollados con mayor esperanza de vida son también los que tienen mayor incidencia de demencias, de modo que, ahora, los investigadores tratan de averiguar si existen formas de prolongar la vida libre de enfermedad y la salud cognitiva y cerebral de los mayores.

En este sentido y aunque no hay una edad en concreto, se puede decir que a mayor educación y actividad cognitiva que haya desarrollado una persona a lo largo de su vida mayor será su reserva cognitiva.

A su vez, la reserva cognitiva se puede favorecer aumentando los niveles de la estimulación, sensorial, cognitiva y motora, la conectividad social y la actividad física de los mayores.

Así y en un momento en el que el grupo de investigación espera una nueva convocatoria de ayudas que financien el proyecto, Soledad Ballesteros indica tres pilares básicos para ayudar a prevenir demencias, como son mantener una actividad social, física y cognitiva constante.



COMUNICACIÓN UNED:”Investigadores de la UNED destacan el uso de las nuevas tecnologías para prevenir demencias"
SAND
FACULTAD DE PSICOLOGÍA DE LA UNED



Carmen T. Izquierdo

Edición Web: Alicia Bardón

comunicacion@adm.uned.es