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La igualdad: “justicia social, inteligencia social”Alejandro Tiana preside la entrega del XVII Premio Elisa Pérez Vera, primera de las celebraciones del Día Internacional de la Mujer en la UNED | ||
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Doce de la mañana. Salón de actos del edificio de Humanidades. Primera jornada de las dos dedicadas a celebrar el Día Internacional de la Mujer en la UNED. En la mesa, una rectora y un rector. Entre la audiencia, una rectora y un rector. Son Elisa Pérez Vera, primera rectora de una universidad española; Alejandro Tiana, actual rector; Araceli Maciá y Juan A. Gimeno los dos rectores anteriores. Los cuatro han dirigido la actividad docente, la política y la economía de la UNED en distintas épocas. Esa mañana, en ese acto, su presencia simboliza la paridad perfecta – 50 y 50 por ciento- en razón de género a la cabeza de una universidad. La UNED sigue siendo la única en su categoría que ha contado con dos mujeres rectoras en los últimos 40 años, después de 800 años de historia de las universidades en España. | ||
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María Teresa Toral, parecía destinada a los estudios de música y arte por tradición familiar. Pero la deslumbró la historia de madame Curie y apostó por la ciencia. Se licenció en Química y Farmacia en 1933. Inserta en el mejor equipo de investigación de su tiempo, construía sus propios instrumentos de vidrio para alcanzar la máxima precisión en la determinación fisicoquímica de pesos moleculares y atómicos. También para ella llegó la guerra, con la acusación de haber construido armas para el ejército republicano. Llegó la cárcel, las torturas y la pena de muerte. Se libró de ella por la presión internacional: al juicio oral asistió, entre otras mujeres relevantes llegadas de todo el mundo, la Premio Nobel de Química Irene Joliot-Curie, hija de su adorada madame Curie. Tras salir de la cárcel el exilio fue también su único camino. Allí se dedicó a la investigación y la docencia y, en sus últimos años, al arte: sus grabados se encuentran en muchos museos de EEUU y Europa. “Podría pensarse”, recuerda Carreras, “que el olvido o el silencio sobre estas científicas pioneras se debe a su vinculación política con la República. Sin embargo otras coetáneas, que pertenecían a familias conservadoras que apoyaron abiertamente el régimen de Franco, no lograron obtener en la posguerra, los años 40 el reconocimiento de sus méritos”. | ||
Piedad de la Cierva, hija de una poderosa familia de Murcia que apoyó la trama civil de la sublevación militar de Franco y secretaria local de la Sección Femenina, había trabajado con el Premio Nobel de Física Niels Bohr, uno de los fundadores de la Física Cuántica. María Teresa Salazar, que como la otra María Teresa había trabajado en el equipo de Enrique Moles, -considerado internacionalmente el mejor laboratorio de su tiempo en determinación de pesos atómicos-, era monja. Ambas optaron a tres cátedras en las universidades de Valencia, Sevilla y Murcia. Dos fueron adjudicadas a varones. La otra quedó desierta. Las razones alegadas por los tribunales obedecían a la total falta de iniciativa de las aspirantes, ya que las investigaciones realizadas eran en colaboración con otros científicos. Ninguna de las reclamaciones interpuestas por las científicas prosperó. La respuesta siempre era idéntica. “Obviamente”, indica Carmen Carreras, “la discriminación no fue por la ideología de las candidatas, sino por su condición de mujer”. | ||
Entre la lucha y la esperanza Los tiempos de olvido y anonimato parecen tocar a su fin. “A pesar de estas trabas para el desarrollo profesional, las mujeres siguieron formándose, investigando, enseñando… A estas primeras generaciones le siguieron otras que recogieron su antorcha hasta llegar a nuestros días”, recuerda Carreras. Uno de los síntomas es la agenda, “Women in Optics planner”, “editada por la Sociedad Internacional de Óptica y Fotónica desde 2005, que se distribuye gratuitamente en más de 25 países. Su objetivo principal es apoyar y promover el trabajo de las mujeres científicas, pero se ha convertido en una herramienta para estimular a las niñas y las jóvenes para formarse en carreras de ciencias e ingenierías”. El trabajo de más de una decena de científicas españolas ya ha sido recogido en sus páginas. | ||
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El aplauso que cerró la entrega del XVII Premio Elisa Pérez Vera en la UNED pareció conmover al incólume, pero amenazado, techo de cristal. | ||
Discurso de Elisa Pérez Vera | ||
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COMUNICACIÓN UNED: Histórico Premios Elisa Pérez Vera | ||
Aída Fernández Vázquez Fotografías: José Rodríguez Edición web: Elena Lobato Comunicación UNED | ||