Madrid, 17 de febrero de 2016

Ramón Adell Argilés, sociólogo y profesor de la UNED, destacó la larga trayectoria de Tomás Alberich como activista y estudioso de los movimientos sociales, primero llamados movimientos vecinales, luego movimientos ciudadanos y ahora movimientos sociales “es un gran investigador de la acción participativa, un nuevo fichaje de la UNED, así que bienvenido a este dinosaurio del conocimiento”. En cuanto a su libro afirmo que “es un cóctel que refleja la trayectoria vital de Tomás, con una parte teórica que recoge gran cantidad de autores, muy didáctica y una segunda parte con la historia de los movimientos sociales donde vuelca su parte de participante, narrando su experiencia y las experiencias de Villalba y Vallecas en el 15M. Se pueden ver las demandas, las utopías, el 7%, el no a la guerra….” Adell reflexionó sobre lo que se ha dicho sobre el 15M, un movimiento que han querido comparar con Mayo del 68 “que parecía que no cambio nada pero nada volvió a ser igual después”. En su opinión el libro describe 40 años del movimiento social en España “pasamos en los años 80/90 de movimientos más compartimentados tipo ecologismo, feminismo… a unos movimientos más globales, a mareas de múltiples colores que son conjuntos de acción, son las plataformas que crean nexos, que se aúnan en programas marco como fuera el gobierno del PP, contra el terrorismo, contra la crisis… ahora hay movimientos en torno al arte, los escraches, las asambleas, las acampadas… la Democracia desde 0. El 15 M fue explosivo, además hay que tener en cuenta la irrupción de las nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación. Estamos en un momento de cambio acelerado”.

M.ª Jesús Funes Rivas, socióloga y profesora de la UNED incidió en que “este libro es muy oportuno, pocos momentos hemos tenido tan complicados como el actual, sin los movimientos sociales no tendríamos los ayuntamientos y el parlamento de ahora… se han planteado desde la calle reivindicaciones como todos queremos hacer política no solo cada cuatro años… gracias a cuestionarse todo vivimos más inestables pero más honestos. Es un libro académico y también divulgativo ya que como activista puede hacer análisis desde dentro y desde fuera, es una mezcla extraña pero es un gran hallazgo esta visión de conjunto”.

Tomás R. Villasante, sociólogo y profesor emérito de la UCM, que ya en 1976/77 publicaba sobre los movimientos sociales y promotor de la primera manifestación autorizada en 1976 que termino con 59 detenidos y muchas sillas de ruedas por los suelos… comenzó clasificando los movimientos sociales por sus épocas “podemos hablar del triángulo de los 80: Estado, mercado y sociedad civil… luego en los 90 del iceberg con gente destacada arriba y el resto del movimiento debajo… y ahora los movimientos sociales son más complejos, como los manglares donde las flores que se ven son lo más bonito, pero que en la parte sumergida esta la riqueza y en la tierra las raíces… hay un gran salto de las asociaciones de vecinos de la transición, más asamblearias y muy distintas de las de ahora… hasta 1979 no tuvimos representación institucional, los movimientos actuales van más acelerados, consiguen cosas más rápidamente, aunque también deberían aprender algo de la generación del 68 que obtuvo éxito en el 79, hablamos de generación de unos 15 años que marca un estilo de hacer las cosas…. los de ahora también y terminaran haciendo tonterías como hicimos los de nuestra generación… las cosas no son para siempre, los procesos no son irreversibles, son movimientos generacionales. Es importante leer lo que paso en la transición para saber lo que puede pasar”. En este punto el profesor Villasante recordó que “en el 15M participaron unos 7 millones de personas, en el 20D, 7 millones votaron el cambio, pero al PP también obtuvo unos 7 millones de votos y quedan unos 15 millones que ni para un lado ni para otro… si no se nutre uno de los movimientos sociales pues se queda dónde está… hay que hacer cosas, está muy bien estar en las instituciones como ayuntamientos, parlamentos … pero si estos no se retroalimentan... en este manglar todo cabe hacia el cambio, aunque yo prefiero hablar de desborde, es decir desde abajo se puede ir empujando hacia arriba para que haya vida… estos poderes-haceres son el caldo de cultivo de un gobierno transformador... como lo son los empresarios para un gobierno de derechas”.

Tomás Alberich Nistal, sociólogo y profesor de la UNED recordó que “en el análisis histórico de los movimientos sociales hay tres grandes oleadas, la primera en los siglos XVIII y XIX que fue el movimiento obrero (aunque algunos analistas hablan de los antiesclavistas como el primer movimiento social), una segunda ola en el 68 con movimientos como el pacifismo, el ecologismo, el feminismo… y una tercera ola con los movimientos antiglobalización, en los años 1998/2000, con aspectos novedosos, como su metodología asamblearia, movimientos de movimientos. De aquí sale en el 2011 el 15M, que puede considerarse una nueva ola, un movimiento participativo, horizontal, antijerárquico”. Alberich quiso abrir el debate dejando sobre la mesa dos reflexiones: una la crítica que se hizo desde los partidos, la izquierda y los sindicatos al 15M que afirmaban que no era un movimiento de clase obrera, que era de una clase media que había perdido lo que tenía, que no era un movimiento revolucionario… y la otra reflexión: que ahora los movimientos se han institucionalizado como paso con los movimientos sociales de los años 80/90 ¿es esto negativo para los movimientos sociales?