Madrid, 5 de abril de 2016

El profesor emérito, catedrático y titular de la Cátedra UNESCO de Educación a Distancia, Lorenzo García Aretio, pronunció la lección magistral La era digital ¿La ignoramos o nos integramos?, a través de la cual reflexionó sobre el futuro de la Educación en relación a esta nueva realidad. García Aretio se cuestionó e hizo plantearse a los asistentes cómo se debe formar a los formadores para que eduquen hoy en día y afirmó que “si la Educación no rectifica estará cavando su propia tumba, pero hay que delimitar hasta dónde debe rectificar. No se trata de buscar un efecto péndulo, sino de alcanzar una educación que potencie el aprendizaje activo, interactivo y ligado a la comunidad; un aprendizaje cruzado y conectado basado en la argumentación y el debate que sea motivador y adaptativo. Y para ello es necesario un docente que se erija en líder y guía de los alumnos, en retroalimentador y referente de los que le siguen”.

El catedrático incidió en la necesidad de compartir los conocimientos y aprovechar las ventajas de la Red para trabajar de una forma colaborativa. “Hoy en día”, afirmó, “las barreras para compartir no son tecnológicas, sino de actitud” y citó a Machado para recordar que “sólo se pierde lo que se guarda, sólo se gana lo que se da”.

Tras su intervención tuvo lugar la imposición de becas a los 56 asistentes al acto, quienes, ya como egresados, fueron acogidos por las palabras de María José Mudarra Sánchez, profesora del Departamento de Orientación Educativa, Diagnóstico e Intervención Psicopedagógica (MIDE II). Mudarra felicitó a los graduados señalando que “vuestra investidura significa que ya no estáis desnudos antes la Ciencia, se os reconoce vestidos o investidos de conocimientos científicos”. Y valoró la función de los profesores en la consecución de dichos Grados afirmando que “hemos procurado acompañaros a lo largo de vuestro viaje conscientes de que todo profesor al interactuar, comunica; al comunicar, educa; y al educar, forma en valores. Pues toda acción educativa persigue un ideal: actitudes, conductas y estilos de vida deseables priorizados según tiempos y circunstancias y, por supuesto, asumidos por cada uno según su propia personalidad. Si educar es humanizar, esperamos haber contribuido con vuestra formación a ofrecer a la sociedad del siglo XXI hombres y mujeres más humanos, más libres a través del conocimiento científico y del dominio del acceso tecnológico al mismo. Más libres en último término a través de los valores asumidos, que guiarán vuestras decisiones profesionales y personales en un nuevo Humanismo intercultural y multidiverso”.

También tuvo oportunidad de intervenir Sonia Celades Negre, quien lo hizo en calidad de recién egresada y como representante de los estudiantes de su Facultad y que aprovechó sus palabras para agradecer a los profesores de la Facultad un trabajo que “provoca ilusión por aprender”. Celades agradeció a la UNED “la oportunidad que nos ha dado de decir que somos educadores sociales y pedagogos” y manifestó que, a cambio, “seremos lo suficientemente perseverantes para labrarnos nuestro futuro”. La delegada finalizó su intervención citando al educador Paulo Freire: “la educación es un acto de amor; por tanto, un acto de valor”.

Finalmente, el decano de la Facultad de Educación, José Luis García Llamas, destacó en su intervención la participación y la colaboración de los estudiantes, “siempre constructiva y positiva”, afirmando que “sin vosotros, los estudiantes, no existirían ni la Facultad ni la Universidad”.

Por su parte, el rector de la UNED, Alejandro Tiana, animó a los nuevos egresados a no considerar este hito como el final de un camino y les animó a ser cautelosos pues “la UNED crea adicción”. Tiana señaló que la celebración de estos actos sirve para sentir que “no estamos solos” y se refirió a la reciente publicación de determinados ránkings universitarios en los que la UNED no ocupa una buena posición manifestando que “somos una universidad que acepta a todo el mundo, que no tenemos notas de corte, que no obligamos a que sus estudiantes tengan que asumir toda la carga académica y de la que los alumnos pueden irse cuando quieran para volver cuando quieran… Todo eso nos penaliza en la elaboración de dichos ránkings pero, aun así, no lo vamos a cambiar, pues esos son precisamente los motivos que nos hacen sentirnos orgullosos de nuestra universidad”. Tiana animó a los estudiantes a sentirse igualmente orgullosos de la UNED “porque son ustedes los que deben decir si pertenecen a una universidad de calidad o no”.

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