Carla Antonelli, diputada por el PSOE en la Asamblea de Madrid:
“Venimos de un país en el que se nos maltrataba brutalmente. Una ley del año 54 encarcelaba a los homosexuales y, en mayor medida, a los transexuales, a los travestis. No es que saliéramos de los armarios, es que nos sacaban a patadas. Hay un momento en que somos especialmente vulnerables, el momento de la transición física –la mental siempre la has sentido-, un momento en que te haces visibles y eres el blanco de todas las iras, todas las fobias, todas las leyes”.
“En 1970 la ley de peligrosidad social pretendía reeducarnos a base de electrochocs y con penas de prisión de entre 6 meses y 6 años. Se abolió en el 79, pero nos seguían condenando con la figura de escándalo público”.
“Algunas personas con una trayectoria profesional brillante, como la catedrática Sonia Hernández, se planteó de jovencita hacer el cambio. Pero sus profesores de La Sorbona la convencieron de los riesgos que iba a asumir. Tuvo que retrasar el proceso hasta casi los 60 años y estudió sin problemas”.
“La ley del matrimonio igualitario incluye muchas medidas de identidad de género. Nadie pide ya que te leventes las faldas o te bajes los pantalones para saber tu aptitud intelectual o tu capacidad para desempeñar un trabajo”.