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Madrid, 21 de julio de 2016




La UNED imparte un curso sobre el método ASIRI de educación holística y humanística

A lo largo de esta semana, las alumnas –sólo se han inscrito mujeres– descubrirán cómo integrar el trinomio sentir-hacer-pensar en el aprendizaje de los niños


Ivette Carrión y Paula Ferrer-Sama

Ivette Carrión (izda.) y Paula Ferrer-Sama


“Asiri” significa “sonrisa” en quechua y Asiri es también el nombre de una innovadora metodología educativa basada, según la propia descripción de una de sus creadoras, Ivette Carrión, “en el trabajo interno del ser, en la aceptación total de sus capacidades potenciando los dos hemisferios del cerebro teniendo, con ello, mayor facilidad de aprendizaje, pues cada lado del cerebro tiene sus propias cualidades y, trabajando juntos, el resultado es incomparable”. Finalmente, Asiri es el nombre del sistema educativo que la UNED está dando a conocer esta semana gracias al curso Sentir, hacer, pensar en la Educación, dirigido por Beatriz Malik, profesora del Departamento de Orientación Educativa, Diagnóstico e Intervención Psicopedagógica, y coordinado por Paula Ferrer-Sama, técnico de Orientación e Inserción Laboral del Centro de Orientación y Empleo (COIE) de la UNED.

“El objetivo de realizar aquí el curso”, señala su coordinadora, “es traer a la UNED una metodología educativa innovadora con la intención, además, de que esto no se quede aquí, sino que llegue a ser un curso de Formación del Profesorado e incluso una asignatura optativa del Máster de Formación del Profesorado, pues vemos que se está hablando mucho de la nueva educación pero no se está enseñando a los profesores nuevas técnicas para aplicarla”.



“Desde mi experiencia personal”, relata Ferrer-Sama, “comprobé cómo el método ASIRI puede cambiar radicalmente tu forma de entender la educación y, en mi caso, descubrirme nuevas capacidades creativas que ni yo misma sabía que tenía. Por eso es un taller vivencial, porque queremos que la gente descubra en primera persona que este método funciona y que, con él, los niños aprenden de una forma más afianzada y estable que a través de la memorización habitual, que además son más felices y que, además, terminan con la autoestima más alta”.

El curso se ha articulado a través de la Facultad de Educación de la UNED y de su profesora Beatriz Malik, directora del seminario, con una amplia experiencia en pedagogía transformadora y siempre receptiva a la integración de nuevos enfoques educativos. Igualmente, los profesores Tiberio Feliz y Ramón Gonzalo, del Departamento de Didáctica, Organización Escolar y Didácticas Especiales, han colaborado con su participación en la primera mesa redonda del curso, en la que se habló de Innovación educativa y creatividad en la escuela.



La UNED es el puente


Taller ASIRI


Curso ASIRI


Ivette Carrión tiene claro por qué el curso se hace en la UNED y no en otra universidad: “la UNED es el puente que enlaza conocimientos con el mundo, por su metodología a distancia. El puente ha sido una figura muy importante a lo largo de la Historia, pues ha permitido conocer culturas, personas, productos… favorece la integración; y eso es precisamente lo que hace la UNED, integrar”.

El método ASIRI tiene como objetivo principal devolver la sonrisa a los niños y al niño interior de cada adulto. Ivette Carrión afirma que “lo que proponemos con ASIRI es ser más conscientes cada vez, ése es el reto de nuestro tiempo: ser conscientes. Entender que somos sonido, color y forma, que ése es nuestro referente, nuestro pan bajo el brazo, lo que traemos, y lo transformamos a través del sentir, hacer y pensar, tres instantes que siempre hacemos pero no de forma consciente”. Los docentes que participan en los cursos y seminarios de este método, según su creadora, “se dan cuenta de que son grandes creadores y empiezan a emplear elementos que estaban siempre alrededor de él y que antes no veía como posibilidades para él, para integrarlas y unirlas en su metodología”.

¿Cómo se hace realidad este espíritu? “Trabajamos por proyectos de una semana de duración en los que empleamos oficios”, explica Carrión, “porque el niño tiene que aprender a hacer para poder trascender. Con la educación actual, los niños usan muy poco las manos, que son la continuación del cerebro, por eso queremos que las usen más, pues cuanto más lo hagan, más sabiduría obtendrán”. Oficios como el de cocinero, albañil o textilero a través de los cuales los niños aprenden “a ser” y “a hacer” y con el que desarrollan “tanto su parte emocional como su parte intelectual”. Una forma, señala la experta, de optimizar “las inteligencias múltiples del individuo”.

En el curso de la UNED se han matriculado 25 personas, todas ellas mujeres, algo que sorprende y para lo que Ivette Carrión tiene su propia explicación: “las mujeres estamos más preocupadas en general por la educación integral de los niños, por saber qué le viene mejor o peor a mi hijo, mientras que los hombres son más pragmáticos”. La conclusión es clara: este cambio también nos va a tocar hacerlo a nosotras.


COMUNICACIÓN UNED: Galería de imágenes



Curso Sentir, Hacer y Pensar en la Educación

Profesores ASIRI

De izda. a dcha.: Ivette Carrión, Tiberio Feliz,
Paula Ferrer-Sama y Ramón Gonzalo



Itziar Romera

Fotografías: José Rodríguez

Edición web: Itziar Romera

Comunicación UNED