La Colonia Zamorana de Cuba se fundó en 1916 como punto de encuentro para emigrados y sus descendientes, con el objetivo de facilitar el intercambio cultural y profesional entre los castellano-leoneses de dentro y fuera de España, desempeñar la labor asistencial a sus asociados, así como la divulgación de la herencia cultural y social zamorana. En la actualidad, esta asociación está presidida por María Victoria Rabanillos, tiene su sede en una casona restaurada en el centro histórico de La Habana, y agrupa a 890 asociados, en su gran mayoría descendientes de emigrantes.
Las jornadas de festejos por el centenario de su fundación incluyeron muestras fotográficas, recitales de danza y música, conferencias y ferias gastronómicas, que tuvieron su punto de partida con la inauguración por parte de Juan Andrés Blanco de la muestra Zamora en Cuba. Emigración y Vinculación, auspiciada por la UNED, el Centro de Estudios de la Emigración Castellana y Leonesa y la Diputación de Zamora, presente durante el mes de octubre en el Real Castillo de la Fuerza en La Habana Vieja. Así mismo, incluyó la apertura de una biblioteca en la sede de la Colonia Zamorana de Cuba y la presentación a cargo de Blanco Rodríguez del libro Memorias de mi vida, de Francisco J. Sánchez Tamame, presidente del Centro Castellano de la Beneficencia Castellana y de la Colonia Zamorana de Cuba durante muchos años, siendo un empresario zamorano muy relevante en Cuba y figura principal del asociacionismo castellano hasta su muerte en 1986.