Una vida dedicada al niobio
Tras ser investida doctora honoris causa por el rector de la UNED, tomó la palabra la doctora polaca Maria Ziółek, quien impartió una magistral lección sobre la catálisis y el uso en ella del Niobio, elemento de la tabla periódica en el que se ha especializado a lo largo de su dilatada trayectoria investigadora. Sobre su interés en el estudio de la catálisis, Ziółek confesó que fue “el deseo de aprender verdades desconocidas la base de mi interés en la Ciencia, especialmente en la parte de la Química dedicada a la catálisis heterogénea. He hecho muchas preguntas, por qué y cómo los materiales interactúan con las sustancias y causan sus transformaciones a otras sustancias. Estas preguntas fueron la fuerza motriz de mi búsqueda en catálisis heterogénea”. En cuanto a la especialización en el comportamiento del niobio dentro del proceso catalizador, la experta explicó que “a principios de los años noventa, la compañía estadounidense Mobil Oil Company descubrió la posibilidad de síntesis materiales mesoporosos ordenados de sílice”. “Mi idea”, añadió Ziółek, fue incorporar niobio en sílice mesoporoso, algo que mi equipo de investigación hizo con éxito por primera vez en la década de 1990, convirtiéndose en un hito en el desarrollo de catalizadores de niobio. A partir de ahí, muchos laboratorios en el mundo comenzaron a usar niobiosilicatos mesoporosos para diferentes procesos catalíticos”.
“Para resumir las características más importantes de los catalizadores de niobio”, concluyó la experta, “se puede decir que la posibilidad de una aplicación muy amplia de catalizadores que contienen niobio se deriva de las propiedades únicas de las clases de niobio. La fuerte interacción de niobio en el soporte con diferentes metales cargados en la superficie de soporte (por ejemplo, oro) crea una transferencia de electrones entre los componentes y conduce a la colección de electrones en la superficie de, por ejemplo, partículas de oro. Tal fenómeno conduce a una actividad muy alta, entre otras cosas, en la oxidación total de desechos”.
De su trayectoria profesional, Maria Ziółek quiso destacar que “cuando comencé mi carrera de investigación, hace muchos, muchos años, nunca pensé que mi trabajo sería tan interesante, que conocería a tantas personas inteligentes y amables, que trabajaría en tantos laboratorios del mundo, que enseñaría a tantos estudiantes fantásticos y que, finalmente, se me otorgaría este prestigioso doctorado honoris causa, otorgado en la UNED, el lugar en el que muchos de mis estudiantes y compañeros de trabajo han tenido la oportunidad de realizar una investigación bajo la gran supervisión de la profesora Rosa Martín Aranda. La UNED es un lugar muy cercano a mi corazón, no solo por la excelente colaboración científica con el equipo de la vicerrectora, sino también por la relación de amistad que me une a Rosa y sus seres queridos”.