Finalmente, el rector de la UNED, Ricardo Mairal Usón, agradeció el trabajo realizado desde el Departamento MIDE II de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación, dirigido por la profesora Beatriz Malik, y desde UNIDIS, el Centro de Atención a Estudiantes con Discapacidad de la UNED, dependiente del Vicerrectorado de Estudiantes y Emprendimiento y dirigido por el profesor Tiberio Feliz Murias. “Ellos”, elogió el rector, “están explorando nuevas formas de seguir avanzando en algo que tanto nos preocupa y por lo que personalmente siento una sensibilidad especial: para que nuestros estudiantes con discapacidad sean nuestro referente”. En este sentido, el rector destacó que “en los últimos años, más de 2000 estudiantes con discapacidad se han graduado, y eso tiene que servir de ejemplo. No pueden olvidar que con la Educación puede alcanzar muchas cotas y lograr muchas metas. Nuestros estudiantes son ejemplo de superación, constancia y convicción de que con conocimiento uno puede lograr muchas cosas”. Mairal felicitó a los orientadores por su tarea y les recordó que “tienen ustedes una gran responsabilidad en el buen ejercicio del Magisterio: la capacidad de entusiasmar a todos sus alumnos para que vean en la Educación Superior la respuesta a muchos de los desafíos que ellos han vivido y que sirvan de acicate, con su ejemplo, para muchos otros”.
Desde el Ministerio de Educación y Formación Profesional, su directora general de Evaluación y Cooperación Territorial, Consolación Vélaz de Medrano, hizo hincapié en la necesidad de hacer entender a todos los implicados que “la inclusión educativa tiene que empezar en la primera infancia, porque si desde los primeros pasos el sistema no se cimenta en la igualdad, vamos perdiendo personas por el camino”. Actualmente, “el 84 por ciento de los niños con discapacidad están integrados en los centros de la red pública educativa, pero todavía quedan muchos fuera. Por eso estamos trabajando para que, en la reforma educativa que propone el Gobierno, el principio de inclusión sea un eje vertebrador”. Además de a avanzar en las tasas de educación inclusiva, Vélaz de Medrano anunció que “el Gobierno se compromete a que en la ESO se titule cuando se tienen aprobadas todas las materias con adaptaciones curriculares significativas. Pues hasta ahora, la realidad es que el alumno, después de hacer un esfuerzo enorme por acabar la ESO con las adaptaciones hechas por sus profesores, se encuentra con que no pueden titular y ese filtro se convierte en una barrera infranqueable y desalentadora”. Igualmente, la directora general avanzó que “tenemos el compromiso de reformar la función docente desde la formación, pasando por el acceso a las escuelas, la carrera profesional a lo largo de su desempeño y la evaluación”.