Desarrollo de la capacidad de trabajo constante, sistemático, organizado, progresivo, independiente y autónomo.
Potenciación de la capacidad de aplicación de la teoría a la práctica.
Desarrollo de la capacidad de síntesis de contenidos y de reflexión sobre estos.
Familiarización con los rasgos característicos o peculiaridades de los textos jurídicos en inglés y práctica con estos.
Conocimiento de las distintas fuentes de vocabulario en inglés jurídico, adquisición de vocabulario jurídico y potenciación del uso de terminología jurídica especializada en lengua inglesa.
Desarrollo de la capacidad de comprensión y expresión en inglés jurídico.
Mejora de habilidades profesionales específicas en inglés (por ejemplo, escribir correos electrónicos, dar presentaciones o charlas, etc.).