Para el profesor de la UNED, Javier Lario, esta investigación supone “la confirmación de la ocurrencia de eventos sísmicos importantes con capacidad para generar tsunamis en esta zona. En los últimos años varios terremotos importantes generados en el Caribe han podido sentirse en Quinta Ro (costa caribeña de Yucatán), pero no había constancia de terremotos importantes con capacidad destructiva. Con el estudio de los cordones de bloques, así como la constatación de eventos sísmicos que afectaron a diferentes ruinas mayas (por medio de la arqueosismicidad) y a diferentes espeleotemas en las cuevas sumergidas (cenotes), se ha podido concluir que un gran evento sísmico genero un tsunami que llego a la costa este de Yucatán entre 500 y 800 AD. La continuación de este trabajo podría evidenciar otros eventos sísmicos en fechas cercanas. Si bien la probabilidad de ocurrencia es baja, hay que tener en cuenta estos procesos en esta zona con alta tasa de turismo costero y con un incremento importante de construcciones hoteleras en la línea de costa.”
Los investigadores utilizaron además un modelo matemático para simular un tsunami generado por un sismo de 7.6 Mw en el sistema de fallas de Motagua/Islas Cisne, con 19 km. de profundidad y 110 km. de largo. Los resultados de esta simulación demostrarían que se puede generar un evento de tsunami que alcance esta zona de Yucatán y con capacidad para generar olas que pudieran mover esos bloques.