La UNED honra a las profesoras y profesores que han dado vida a esta universidad

Historia viva de la UNED. Las profesoras y profesores eméritos del curso 2020-2021 han dado hoy una lección de vida y de dedicación a la labor docente, investigadora e institucional en el acto de despedida que la UNED les ha dedicado. Los dieciséis profesoras y profesoras han desgranado su trayectoria en lo que ha sido un emocionante acto que ha cerrado el rector de la UNED, Ricardo Mairal Usón, con estas palabras: “Al contemplar la trayectoria de todos vosotros, la UNED tiene sentido”. En el acto también ha participado la vicedecana de la Facultad de Educación, María José Bautista Cerro-Ruiz.

El acto en canal UNED

Han sido dieciséis las profesoras y profesores eméritos que han cerrado hoy un capítulo fundamental de sus vidas simbolizado en el acto que la UNED ha organizado como homenaje a su trayectoria y la incalculable aportación que han hecho todas y todos ellos al crecimiento de esta universidad. Mª Luisa Sevillano García ha sido la encargada de representar al conjunto de profesores eméritos en este acto en el que la emoción ha asomado a los ojos de los protagonistas y de los presentes en más de una ocasión. Y es que es toda una vida dedicada a la UNED, como recordaban.

Hoy se ha palpado la Historia viva de la UNED. Como recordaba el rector honorario doctor Mariano Artés Gómez (Escuela de Ingenieros Industriales): “En los cuarenta años desde que llegué a la UNED mucho ha cambiado esta universidad que empezó sin apenas recursos materiales y humanos. La UNED era mirada con desconfianza y cuestionada interna y externamente. Hoy podemos sentirnos legítimamente satisfechos porque hoy nuestra universidad está consolidada e integrada en el panorama universitario gracias al trabajo realizado”.

De otro modo igual de elocuente lo ha expresado el doctor Sebastián Dormido Bencomo (Escuela de Ingeniería Informática): “La UNED ha marcado mi vida universitaria ya que aquí he concentrado la mayor parte de mis anhelos y sueños… He tratado de dar lo mejor de mí en mi actividad docente e investigadora y la he visto crecer y reinventarse. Una universidad pública con presupuesto mucho menores a los de otras, una universidad comprometida, una universidad admirable. El año que viene cumplimos nuestras bodas de oro y será una buena ocasión para poner negro sobre blanco lo mucho que la UNED ha aportado a la sociedad española”.

El rector ha agradecido la labor desempeñada y ha tenido unas palabras individuales para cada uno de los homenajeados poniendo en valor su aportación en los niveles desarrollados: académico, docente, investigador o de gestión de los propios organismos universitarios. Además, Mairal Usón ha querido dejar constancia de que son semilla viva que caen un surco del cual han brotado y seguirán brotando nuevas ramas que contribuirán al conocimiento de la sociedad y al enriquecimiento de la propia UNED.

Esto lo han reflejado en sus palabras todos los intervinientes que han expresado un tremendo orgullo del legado humano que dejan. Por ejemplo, el doctor Manuel Criado Sancho (Facultad de Ciencias) ha comparado la universidad con la máquina de vapor: “Lo que es la energía a la máquina de vapor lo es el conocimiento a la Universidad. Ser profesor es pasar el testigo a otro y transmitir aquello que aprendiste”. La doctora Soledad Ballesteros Jiménez (Facultad de Psicología) coincidía en este punto al indicar cómo lo más importante de su carrera han sido “los dieciséis alumnos becados predoctorales porque han sido clave en la tarea docente e investigadora”.

El rector no ha querido dejar de mencionar el lado humano que han aportado los homenajeados, “la cultura del corazón”: “Ese es el camino de nuestra universidad: además de los méritos académicos también están las personas”. “Sois un ejemplo y referente por el que toda la comunidad universitaria siente el agradecimiento que hoy os expresamos”, ha concluido el rector.

Algunos de estas profesoras y profesores continuarán vinculados a la UNED para seguir aportando su conocimiento y la experiencia que da la edad. Como ha señalado en el acto la doctora Ballesteros, citando al jurista Javier Gómez de Liaño, “la edad jamás puede ser un criterio de exclusión porque la creatividad, la experiencia y la estabilidad tiene un gran peso según avanza la vida. (…) Con la edad, tal vez perdemos memoria y agilidad mental pero nuestra visión del mundo cambia para expandirse”.

También ha hecho referencia a este punto, el doctor Narciso Martínez Morán (Facultad de Derecho): “Se es verdaderamente anciano cuando se pierde la curiosidad intelectual y nosotros ni somos viejos ni ancianos. Este debe de seguir siendo nuestro reto, continuar, seguir iluminando al mundo”.

Otro punto de coincidencia de todos los presentes ha sido el profundo orgullo que sienten de haber formado parte y haber sido artífices del crecimiento de la UNED. “Ha sido un placer y un orgullo trabajar para la UNED e impartir docencia a millares de alumnos”, ha subrayado Martínez Morán.

De otro modo lo expresaba el doctor Honorio Velasco Maíllo (Facultad de Filosofía): “Debo agradecer a esta universidad que creara la titulación de Antropología y agradezco a todos los que me acompañaron y la buena recepción y ayuda de los rectores, particularmente de cuánto me sufrió Miguel Ángel Sebastián. Gracias además porque han contribuido a consolidar la disciplina de la Antropología en la Universidad española”.

El doctor Juan Manuel Martín Sánchez (Escuela de Ingenieros Industriales) lo ha expresado así: “He tenido la suerte de ser profesor e investigador en universidades de España y fuera de España hasta llegar a la UNED donde se han cumplido mis mejores sueños académicos”. La doctora Carmen Jiménez Fernández (que fue decana de la Facultad de Educación) también ha querido reflejar su gratitud con esta bella frase: “Hemos colaborado con la UNED y nuestra sinfonía de fondo ha sido una bella melodía”. Si bien, no ha querido olvidar que no todo ha sido un camino de rosas: “Mi trayectoria ha sido una continua lucha y una disciplina constante pero eso sí, confieso que he vivido”.

En esta línea, como ha recordado el doctor José Nicolás Romera, (Facultad de Filología), “es el esfuerzo duro y continuado el precio que se paga para alcanzar cualquier meta. De ahí que los resultados de la investigación hayan sido muy fructíferos y abundantes”. Nicolás Romera ha tomado la palabra en representación de sus colegas los doctores José María Lucas de Dios, Miguel Pérez Priego y Alicia Yllera Fernández. “Nos une una amistad claramente manifiesta. Esto es muy importante porque esto no se da siempre entre colegas cercanos y porque ha hecho que trabajemos conjuntamente y eso ha beneficiado a nuestra labor”, ha subrayado.

Y, cómo no, la familia ha destacado en el capítulo de agradecimientos, principalmente por ser apoyo y por haberle robado el tiempo que estas personas han necesitado para construir la UNED y aportar su conocimiento. “Sería injusto no dar las gracias a mis hijos que sufrieron mis ausencias y por encima de todo, gracias, Marisa, compañera y guía siempre sin ti no hubiera sido posible, gracias por tu compañía y por todo tu amor”, ha dicho emocionado Martínez Morán.

Al igual que el doctor el doctor Antonio Medina Rivilla (Facultad de Educación), con palabras de cariño hacia la que fue artífice de su llegada a la UNED: “Solo recordar a mi mujer, Conchita, que gracias a ella estoy aquí.

El rector honorífico también ha hecho un agradecimiento expreso: “A mi familia, María José, y a mis hijos a los que sin duda les robé tiempo”. En la misma línea, Martín Sánchez ha dicho: “Quiero agradecer a mi mujer, mi refugio y a mis hijos que han sido la alegría permanente de mi vida y un motor para avanzar en la vida”.

Como resumen de este momento vivido hoy en la UNED, las palabras con las que ha concluido su intervención Martínez Morán: “Me voy con la conciencia tranquila de haber dedicado toda mi vida a la docencia y a mis alumnos. Estoy preparado para la jubilación definitiva y afrontar el futuro con sosiego y tranquilidad. Es hora de sentarse en la sombra del ciprés y seguir viviendo intensamente, tiempo para amar y para vivir la libertad”.

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