La metodología empleada fue cualitativa y consistió en hacer entrevistas en profundidad, analizar el expediente judicial que se abrió a un alcalde por una iniciativa relacionada con la recuperación de la memoria histórica, analizar las actas municipales del pueblo en el que tuvieron lugar los hechos, consultar el Archivo Histórico Provincial de Badajoz, estudiar la prensa local y leer las fuentes secundarias pertinentes, tanto teóricas como históricas. La profesora opina que esta investigación es muy relevante para los estudiosos de la transición española en general y de los procesos de recuperación de la memoria histórica en particular. “Por un lado, explica las limitaciones que existían en la transición, dada la resistencia de algunos actores clave a interiorizar las nuevas reglas del juego democrático, muy particularmente si suponían poner en cuestión el relato sobre la guerra civil inculcado durante décadas por el franquismo. Pero, por otro lado, también pone de manifiesto las posibilidades que se abrieron en dicha etapa para empezar a modificar las relaciones de poder a nivel local y para comenzar a dignificar los restos de los represaliados por la dictadura y a rendirles tributo en sus respectivas localidades”.
Las conclusiones de la investigación apuntan que el recuerdo de la Guerra Civil en la transición estaba muy vivo y resultaba muy traumático, particularmente para los familiares de las víctimas del franquismo, el no haber podido dar una sepultura digna a sus deudos ni reivindicarlos en el espacio público, ya que a nivel local ni siquiera se los había podido mencionar. También se demuestra que estas iniciativas se produjeron desde abajo, bien promovidas por familiares bien por militantes de base de partidos y sindicatos de izquierdas. La falta de apoyo, y más aún de liderazgo, desde la dirigencia regional y nacional de los mismos causó desconcierto y sensación de vulnerabilidad a quienes las impulsaron. Finalmente, se han mostrado las dificultades que entrañaban acciones de este tipo en un tiempo en el que los legados del franquismo permanecían presentes en algunas instituciones.