La asignatura “Igualdad y no discriminación en la Unión Europea” aborda el estudio de  uno de los grandes pilares de las democracias actuales. Así es, la igualdad, como ocurriera con la libertad, es una de las grandes conquistas de las Revoluciones liberales de finales del siglo XVIII, especialmente por lo que hace a las Revoluciones Americana y Francesa. De ahí que para comprender el verdadero significado que tiene en la actualidad el principio de igualdad y el derecho a no ser discriminado, sea preciso tener presente la evolución acumulativa que, el principio de igualdad, ha experimentado desde las Revoluciones liberales hasta nuestros días. Igualdad y no discriminación, por otra parte, cuya conquista también se ha pretendido hacer efectiva, desde antaño, tanto desde el Derecho Internacional Universal, como desde el ámbito europeo, ya sea en el marco del Consejo de Europa, ya sea en el de la Unión Europea. Así es, a pesar de la inexistencia del reconocimiento de un catálogo propio de derechos por parte de los Tratados fundacionales de la Unión Europea, es preciso destacar la labor interpretativa realizada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea del principio de no discriminación por razón de nacionalidad, y muy especialmente, del principio de igualdad de retribución, reconocidos, respectivamente, en los artículos 6 y 119 del Tratado de la Comunidad Económica Europea, ya que, dicha labor interpretativa convirtió al citado art, 119 en el precepto “inspirador de toda la normativa antidiscriminatoria en la materia” en el marco comunitario. Se puede afirmar, entonces, que desde la jurisprudencia comunitaria, así como desde el Derecho derivado de las instituciones europeas, se va a contribuir en la evolución del principio de igualdad y el derecho a la no discriminación en el ámbito comunitario, evolución que, progresivamente, se vendrá a plasmar a través de los distintos Tratados constitutivos comunitarios, y en concreto, a través de los Tratados de Ámsterdam y de Niza, viniéndose a consolidar dicha evolución con la Carta de los Derechos de la Unión Europea.
Desde esta perspectiva y teniendo presente, de un lado, el lugar central que en materia de derechos ocupa la defensa de la igualdad y el derecho a no ser discriminado en el marco de la Unión Europea, y de otro que, de acuerdo con el artículo 10.2 de nuestra Constitución, las normas relativas a los derechos fundamentales y a las libertades públicas que la Constitución reconoce se interpretarán de conformidad con la Declaración Universal de Derechos  Humanos y los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas materias ratificados por España; parece incuestionable que, esta asignatura optativa ofrecerá al alumno la posibilidad de conocer la regulación jurídica, así como la doctrina jurisprudencial, y con ello, tanto el conocimiento teórico como práctico, que, en materia de igualdad, se mantiene en la Unión Europea, lo que, a su vez, permitirá al alumno tener un conocimiento más exacto de nuestra propia normativa, en tanto que la normativa comunitaria se configura como criterio de interpretación de nuestra normativa de producción interna. Producción normativa interna que, en materia de igualdad, se ha manifestado en un amplio elenco normativo durante los últimos años, como lo demuestra la aprobación de la Ley 39/1999, de 5 de noviembre, para promover la conciliación de la vida familiar y laboral de las personas trabajadoras, la Ley 30/2003, de 13 de octubre, sobre medidas para incorporar la valoración del impacto de género en las disposiciones normativas que elabora el gobierno; la Ley 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género; la Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia, y muy especialmente, la reciente Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva entre hombres y mujeres.