Madrid, 22 de enero de 2015

Honorio Velasco, padrino y autor de la laudatio del profesor W. Fernandez, ha destacado que el maestro “se siente un ser humano conviviendo con otros seres humanos, en particular aquellos con los que ha hecho sus trabajos de campo en África y en Asturias”. Mientras, sus colegas antropólogos lo ven como “quien ha contribuido con su estímulo y su presencia a la consolidación de la Antropología en España”. Y él, conocedor de los rituales, “sabe cuánto agradecimiento puede transferir un ritual como éste, que es en su honor, pero que a nosotros nos proporciona otro honor: el de que forme parte de nuestra comunidad universitaria de la UNED”.

La lección magistral del profesor James W. Fernandez, se ha centrado en el “respeto para la vida”. Ha hecho un repaso de las distintas formas de analizar la realidad a través de la historia de la filosofía, desde pensadores como Santo Tomás de Aquino y Averroes, hasta las de la época de la Guerra Fría, cuando “parecía perfectamente normal y pragmático hablar de destrucción mutua garantizada, sin considerar que las consecuencias de tan razonables políticas, bien hubieran sido la extinción estricta de la raza humana”. Su concepto de injusticia distributiva denuncia “estos fanatismos sangrientos – decapitaciones, ejecuciones y fusilamientos en masa, insensatez, demencia…-de gente convencida por sus inventos mentales que están dispuestos a quitarse su vida y la de toda la humanidad” y que, deseó, “¡ojalá! puedan ser pasajeros”.

Julián López, padrino y autor de la laudatio del profesor Stanley Brandes, ha retratado a un joven inmerso en el tumulto intelectual de la universidad norteamericana en plenos años 60, activista contra la guerra de Vietnam, plena de manifestaciones, conciertos multitudinarios y todas las fórmulas de protesta social ensayadas y por descubrir. Llegó desde allí con su familia recién estrenada –su esposa y su hija de pocos meses-, en busca de un espacio rural, aislado y bucólico donde poder desarrollar un trabajo de campo bien acotado y sencillo. Se encontró, efectivamente, un área rural donde se sembraba con yuntas de mulas que tiraban de un arado romano, sin agua corriente en las casas, con un único teléfono y una sola televisión en el pueblo y cuya tecnología punta era el trillo, que separaba mecánicamente el grano de la paja. A su familia los llamaban “los franceses” y allí, efectivamente, comenzó sus estudios de los rituales de la comida, la bebida, la muerte y, como pudo, los roles establecidos entre hombres y mujeres. “Tras muchos años de trabajo de campo continuado podemos decir que su labor ha ayudado de manera significativa a la visualización del campo etnográfico español en Estados Unidos. Gracias a antropólogos como él y a su magisterio ha sido más fácil que en España la Antropología sea un campo vigoroso para el análisis y la acción social”.

Tras escuchar a los doctores honoris causa por la UNED Fernandez y Brandes, se ha procedido a la investidura de los nuevos doctores de la UNED que en palabra del rector son “el ejemplo de la política investigadora de la UNED”.

Gonzalo Sampascual Maicas, el que fuera director del servicio de Inspección de la UNED durante doce años ha recibido la medalla de la UNED. El rector, Alejandro Tiana ha querido “felicitar al profesor y amigo por el reconocimiento a su labor realizada durante 12 años en el servicio de Inspección. No es la Inspección una tarea grata, pero es necesaria. El profesor Sampascual la realizó tan concienzudamente como nos tiene acostumbrados y es justo mostrarle el reconocimiento de la UNED”.

COMUNICACIÓN UNED: Galería de imágenes de los nuevos doctores

Así de contundente se ha manifestado Federico Morán Abad, secretario general de Universidades, quien ha elogiado la brillante trayectoria de los dos antropólogos investidos Honoris Causa por la UNED en este acto académico, destacando que “sus estudios a lo largo de 40 años, han contribuido grandemente a conocer y comprender mejor los cambios sociales y políticos en la España de ese periodo. Y les ha recodado que este “Honoris “les abre las más altas puertas del saber".

El secretario general de Universidades ha abordado rápidamente la actual situación de la universidad declarando que “las dificultades económicas, que existen, no son el único escollo que debe superar la enseñanza superior. Se subestima, no solo la adquisición de conocimientos básicos, si no que se obvia, que en la vida todo aprendizaje requiere esfuerzo. Y el mal causado, suele ser irremediable, porque lo que se aprende o se deja de aprender antes de ingresar en la universidad, condiciona lo que puede aprenderse, después en el Campus”. Como otro factor distorsionante, Federico Morán, se ha referido a la gobernanza “el gobierno de las universidades cambió radicalmente, al desarrollar la autonomía que prescribe la Constitución, pero no hemos resuelto los necesarios equilibrios entre autonomía y responsabilidad. Necesitamos un nuevo modelo". En cuanto a la financiación del Estado, la ha vinculado directamente a los resultados, a la rendición de cuentas, y ha sugerido que “quizá deberíamos recuperar la figura de los contratos-programa y elaborar un plan estratégico claro de cada universidad, al que por supuesto, no puede ser ajena la UNED“. También ha sugerido la especialización "no podemos ser buenos en todo. Debemos tener claro cual es el modelo académico de cada universidad. No podemos ser generalistas, debemos concentrar esfuerzos en aquello en lo que cada universidad es mejor".

Ha abogado por la autonomía universitaria como una forma de “defender la libertad de enseñanza y desarrollar la investigación. Este es un punto clave, debemos formar buenos especialistas. Asegurar cantidad y calidad. Hay que avanzar en este campo, no podemos pararnos. No podemos obviar que somos actualmente la novena potencia científica del mundo. Hay deficiencias, seguro, pero soportamos la comparación con los países más avanzados. Debemos mejorar la innovación, y la universidad es el motor más importante para conseguirlo. Estamos obligados a la creación, a la transparencia y a la difusión técnica y humanística. La universidad debe ser el motor que genere nuevas propuestas y favorezca el avance social. Hay que acercar la universidad a la sociedad para generar ámbitos de vanguardia que favorezcan mejores posibilidades en el entramado social y laboral”.

El rector Alejandro Tiana, por su parte, ha querido erigir a la investigación como gran protagonista del acto, destacando las dificultades a las que se enfrenta la universidad a la hora de desarrollarla y que ha cifrado en tres: “disminución de plantillas de PDI y aumento de la carga docente que en ocasiones va en detrimento de la tarea investigadora; descenso de la financiación pública española para I+D; y reducciones presupuestarias en la propia UNED en la cuantía que podemos destinar a financiar nuestro plan de promoción de la investigación”. A pesar de estos obstáculos, Tiana ha destacado que han sido numerosos los equipos de la universidad que han mantenido sus cotas de resultados, por lo que ha hecho un llamamiento a los docentes e investigadores “para que no cejen en su empeño investigador y sigan esforzándose en buscar nuevas vías de financiación” y a los responsables de financiación de I+D+i “para que encuentren el camino de ampliarla”. En esta línea, el rector ha hecho referencia a los cambios realizados en el vicerrectorado de Investigación, al que se han añadido competencias relativas a la Transferencia de resultados.

COMUNICACIÓN UNED: Imágenes del acto

CANAL UNED: Vídeo del acto

CANAL.UNED: Noticia Santo Tomás de Aquino en la UNED