“El maestro no es el que hace discípulos, sino el que contribuye a formar nuevos maestros”
Entrevista con Yolanda Gómez, directora de la Escuela Internacional de Doctorado de la UNED
Las declaraciones de Yolanda Gómez son de las más solicitadas a la UNED por los medios de comunicación. Solicitan su opinión sobre aquellos temas más vinculados a su especialidad como catedrática de Derecho Constitucional. Será por su discurso didáctico, por su don de gentes, o porque casi siempre encuentra el hueco para llenar la laguna intelectual de su interlocutor. Con todo, el centro de su actividad ha sido la docencia y la investigación a lo largo de más de treinta años de actividad en la UNED, donde ha asumido distintos cargos académicos, publicado un número elevadísimo de libros y artículos científicos y participando en foros e instituciones internacionales.
También ha dirigido tesis doctorales sobre Derecho Constitucional. Siete. De sus doctorandos, cuatro son profesores de universidad, con su carrera ya consolidada, y otros desarrollan su actividad en instituciones nacionales y extranjeras.
Y es que a Yolanda Gómez se le nota la vocación docente. Y, aunque no lo hace, ni lo necesita, podría presumir de ser una buena maestra. Queda claro cuando alude a la que podría ser su máxima en su nueva etapa al frente de la Escuela Internacional de Doctorado de la UNED, parafraseando una cita que recuerda haber escuchado hace años: “El maestro no es el que hace discípulos, sino el que contribuye a formar nuevos maestros”. La dirección de tesis doctorales tiene mucho que ver con esto.
.- Cuando una persona asume una carga de trabajo como la que conlleva la dirección de la nueva Escuela Internacional de Doctorado de la UNED ha de tener una idea del proyecto que va a liderar ¿Cuáles son los tres retos que ya tiene encima de la mesa?
.- Primero consolidar la Escuela como referente de estos estudios dentro del marco de Investigación en la UNED, ámbito que está recibiendo una gran atención por parte del vicerrector de Investigación y Transferencia, Ricardo Mairal. Que sirva efectivamente de modelo para trabajos singulares, innovadores y para la transferencia del conocimiento.
Segundo, internacionalizar la Escuela en términos reales. Crear convenios activos en los que los estudiantes puedan realizar sus tesis doctorales y difundir sus resultados tanto en el ámbito nacional como internacional. Desarrollar, en fin, una efectiva colaboración con la sociedad.
Y tercero, cumplir con la teoría de la investigación global, establecer y mantener el contacto con la sociedad y la industria y apostar por la transferencia. Porque la universidad no puede aislarse de la realidad y del mundo. La investigación ha de servir a la sociedad y a la comunidad científica.
.- Se pone al frente de una Escuela que acaba de cambiar de nombre, incluyendo el término internacionalización. Durante su toma de posesión como directora, el rector le ha señalado esto como uno de los objetivos prioritarios. También usted lo acaba de incluir entre sus retos ¿Por dónde va a empezar?
La internacionalización exige difundir eficazmente nuestra actividad como Universidad y, específicamente, como Escuela Internacional de Doctorado pero también es necesario estar abiertos a propuestas e iniciativas de otros centros de investigación y universidades con los que podamos llegar a acuerdos efectivos de colaboración. Es importante en este sentido, disponer de una buena política de difusión que permita que los demás conozcan nuestro trabajo y las posibilidades de colaboración con la UNED. Espero poder trabajar en este punto y mejorar el conocimiento que actualmente hay de los estudios de Doctorado en nuestra Universidad.
.- En estos duros tiempos de crisis, no sólo económica, ¿qué ofrece un doctorado de la UNED frente a cualquier doctorado de otra universidad ¿Por qué y para quiénes somos la mejor opción?
Sin duda lo esencial es ofrecer calidad científica. Un doctorado no es lo mismo que un grado o un máster y si en todos los títulos la calidad es lo prioritario, en el doctorado la exigencia debe ser máxima. La metodología de la UNED puede ayudar a cursar el doctorado con cierta compatibilidad con actividades profesionales, por ejemplo, asistiendo a seminarios y actividades formativas online pero no podemos olvidar que en este nivel de formación científica el contacto regular y directo entre el estudiante y su director o directora es un requisito inexcusable.
.- Usted está acostumbrada a los retos. ¿Querría darnos un par de claves para mantener la ilusión ante la apatía y descontento que se respira en muchos ambientes?
.- Como dije en mi intervención tras la “toma de posesión”, la Escuela Internacional de Doctorado no nace ahora. Otros han trabajado y contribuido antes a este proyecto y a todos ellos debemos agradecimiento, a quienes impulsaron la creación de una Escuela de Doctorado en la UNED, a las Facultades que renunciaron a algunas de sus competencias para que así fuera posible, a los que han ocupado cargos de responsabilidad en la Escuela, a los coordinadores y secretarios de los Programas de Doctorado, al Personal de Administración y Servicios, al Instituto Universitario de Educación a Distancia (IUED) y al personal de la Biblioteca que participan en las Actividades Formativas de los Programas. Tengo ilusión en este proyecto porque objetivamente es un proyecto valioso. Para mí es realmente un honor haber sido elegida para dirigir la Escuela Internacional de Doctorado y espero contribuir, aunque sea modestamente, a consolidar su trabajo y su proyección nacional e internacional.
