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Madrid, 26 de octubre de 2018




La UNED rinde homenaje póstumo al catedrático Ramón Pérez Juste

El rector en funciones de la universidad, Ricardo Mairal, presidió el acto junto al decano de la Facultad de Educación, José Luis García Llamas, y Arturo Galán González, director del Departamento de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación I

Ricardo Mairal, en el centro, acompañado de García Llamas (izda.)
y Arturo Galán, escuchan la intervención de Ramón Pérez (hijo)


El Salón de Actos de la Facultad de Educación, la que fuera segundo hogar del catedrático de Educación Ramón Pérez Juste, acogió el 23 de octubre un sentido homenaje póstumo a su figura presidido por el rector en funciones de la UNED, Ricardo Mairal, quien estuvo acompañado en la mesa presidencial por el decano de la Facultad, José Luis García Llamas, y Arturo Galán González, director del Departamento MIDE I y compañero de despacho de Pérez Juste durante 18 años. Al acto asistieron la viuda del homenajeado, Conrada, y sus cuatro hijos, así como otros familiares y numerosos amigos tanto de la UNED como de fuera de ella. El acto se completó con el descubrimiento de la placa de la sala de la Facultad que ha recibido el nombre del homenajeado y con la inauguración de una exposición realizada con el material didáctico y otros objetos pertenecientes al profesor. Carmen Jiménez Fernández, catedrática de Pedagogía Diferencial de la universidad, fue la encargada de pronunciar la semblanza de quien fue su compañero durante más de cuatro décadas y del que quiso destacar sus tres máximas vitales: “tejer, unir, construir juntos”.





Jiménez Fernández quiso destacar la prolífica trayectoria universitaria de Pérez Juste: “En la UNED ha sido (casi) todo. Fue profesor en todos los niveles y ocupó todos los cargos menos el de rector”. De este largo recorrido, su compañera hizo especial mención al momento que compartieron él como vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado y ella como decana de la Facultad de Educación y en el que se consiguió “un nuevo vicedecano para la Facultad y se aprobaron los Planes de Estudio correspondientes a las licenciaturas en Pedagogía y Psicopedagogía y a la Diplomatura en Educación Social”.

Su buque insignia”, afirmó la catedrática, “fue sin duda la evaluación pedagógica: evaluación orientada a la mejora de los procesos y resultados de la Educación, a la toma de decisiones de mejora. Creó su propio modelo de evaluación, que ha tenido y tiene amplia resonancia en el panorama educativo”. En este campo, la experta resaltó una de las obras de Pérez Juste, Evaluación de Programas Educativos (La Muralla, 2006), “en la que hace una apuesta decidida por una concepción integral de la evaluación, por la necesidad de armonía y coherencia entre la evaluación de los aprendizajes y de la enseñanza, de los programas y de los profesores, de los centros educativos. Muestra su predilección por la función formativa de la evaluación y se manifiesta partidario de aplicar la complementariedad metodológica en la evaluación de programas”.

Carmen Jiménez Fernández

Web y vídeo homenaje


Tras la semblanza pronunciada por Jiménez, Arturo Galán presentó la página web Ramón Pérez Juste: Gran Maestro y académico, gigante en humanidad, creada con motivo del homenaje y en la que se recogen todas las facetas de la vida del catedrático, tanto las relacionadas con la docencia y la investigación como las más personales. En ella se pueden leer igualmente los múltiples mensajes de condolencia que se recogieron tras su fallecimiento. Para mostrar sus testimonios y los de las personas que no pudieron asistir al acto, tomó la palabra la vicerrectora de Estudiantes y profesora de la Facultad de Educación, Ángeles González Galán, quien, visiblemente emocionada, compartió con los asistentes varios mensajes de cariño y reconocimiento a quien fuera su compañero. González Galán destacó las palabras de Gonzalo Jover, presidente de la Sociedad Española de Pedagogía, quien escribió “por algo será que quienes tuvimos la suerte de gozar de su magisterio sea eso lo que más vivamente recordemos. Ramón Pérez Juste era un buen profesor porque era una buena persona, que sabía escuchar a sus estudiantes y se preocupaba cada día por ofrecernos lo mejor de sí mismo”.


Las palabras de la vicerrectora finalizaron con la emisión de un vídeo creado por el Centro de Medios Audiovisuales de la UNED (CEMAV) en el que se recuerda la vida de Ramón Pérez Juste.


Web Pérez Juste



José Cardona Andújar, profesor del Departamento de Didáctica, Organización Escolar y Didácticas Especiales; Catalina Martínez Mediano, profesora del Departamento MIDE I; Francisco López Rupérez, expresidente del Consejo Escolar del Estado; José Manuel García Ramos, catedrático de Métodos de Investigación de la Universidad Complutense de Madrid; Francisco Morales, a quien Pérez Juste dirigió su tesis, Lorenzo García Aretio, catedrático de Teoría de la Educación y Educación a Distancia; Arturo Galán González, director del Departamento MIDE I, y José Luis García Llamas, decano de la Facultad de Educación de la UNED, intervinieron a continuación para compartir con los asistentes su visión del homenajeado. Mayoritariamente, las alocuciones se centraron en el plano personal de Pérez Juste, a quien todos coincidieron en definir como un amigo, un hombre de fe y, en definitiva, un hombre bueno al que definían tres palabras: “generosidad, sabiduría y humildad”.



Cuando “bueno” ocupa el espacio que no llena “excelente”

Ramón Pérez (hijo)

Sobre esta coincidencia hizo girar sus palabras el último interviniente, Ramón Pérez (hijo). En su intervención, sentida y emocionada, bromeó sobre la posibilidad de que la versión que tanto él como sus hermanos tenían de su padre no coincidiera con la que iban a ofrecer todos aquellos que iban a intervenir en el homenaje. “Pero no”, afirmó, “todo lo que yo tenía aquí anotado para definir a mi padre lo habéis corroborado vosotros, aunque nosotros lo hemos vivido desde el otro lado”. Así, relató el hijo del profesor, “habéis hablado de su disposición para todos, esa disposición que nosotros vivíamos detrás de una cena fría, de unas vacaciones atrasadas…”. Como ejemplo, Ramón Pérez relató que “en el pueblo donde veraneamos durante 30 años no lo conocían, porque siempre estaba trabajando, pero siempre dijeron de él que era un buen tipo”.


A su entrega al trabajo hizo referencia su hijo con un gran sentido del humor, recordando la época en la que fue vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado: “no sé si aquí lo notasteis, pero trabajó mucho. Muchísimo”. También quiso confirmar las anécdotas desgranadas por sus amigos: “es verdad que nos planchaba la ropa cuando llegaba a casa. Yo siempre he dicho que he tenido dos madres, porque siempre nos cuidó muchísimo. Y es algo que ahora me sorprende cuando veo a mis amigos, que no tienen tiempo para sus hijos”. Por el contrario, desmintió a los que afirmaron que nunca se enfadaba. “Alguna vez se enfadó”, reconoció su hijo, “y su frase era iros todos a hacer puñetas, que era como muy del siglo XV”.


El hijo de Ramón Pérez Juste, que habló en nombre de sus tres hermanos –José, Eduardo y Carlos- y de su madre, Conrada, quiso destacar la faceta cristiana de su padre “que siempre trató de inculcarnos aunque también respetó nuestras decisiones finales, porque nosotros somos todos distintos y especiales”. “Era un hombre de fe robusta y un hombre bueno. Y digo bueno porque a veces esta palabra llena el espacio que no ocupa la palabra excelente”.

El rector en funciones de la UNED, Ricardo Mairal Usón, fue el encargado de dar por concluido el acto, y lo hizo recordando unas palabras de Isabel Allende en su obra Eva Luna -“La muerte no existe, la gente sólo muere cuando la olvidan; si puedes recordarme, siempre estaré contigo”- a las que añadió que “la carrera profesional no se acaba con la muerte cuando se ha ejercido el Magisterio en su acepción más profunda”.



Un referente en Educación


Imágenes Pérez Juste

Tal y como Lorenzo García Aretio, catedrático de la UNED y amigo del profesor Ramón Pérez Juste, escribió en su blog personal cuando falleció el homenajeado, “Ramón Pérez Juste ha sido un referente como docente y como investigador. Y un gran ejemplo como persona. Persona íntegra donde las haya, lleno de nobleza, rectitud, humanidad y entrega apasionada a su tarea, a su UNED, a sus amigos e, incluso, a aquellos que no le consideraban como tal.”


El Profesor Pérez Juste fue en su momento uno de los catedráticos más jóvenes de la universidad española. Tras obtener los premios extraordinarios de Licenciatura y Doctorado, así como el Premio Nacional Fin de Carrera, Pérez Juste fue durante diez años maestro nacional (1961-1971). En este periodo inició los estudios de Pedagogía con una beca especial para maestros. Entre 1974 y 1977 fue profesor encargado de curso en la Universidad Complutense. Pronto, en 1978, recibió el nombramiento como profesor adjunto interino primero y como profesor adjunto después, cargo que desempeñó en la UCM hasta 1981. En ese mismo año obtuvo el puesto de profesor agregado (los antiguos catedráticos) en la Universidad de Santiago de Compostela, donde estuvo solo diez meses, para terminar como catedrático de la UNED desde noviembre de 1981 hasta el 30 de septiembre de 2012, fecha de su jubilación. Aún desempeñó sus funciones como profesor emérito durante cuatro años más, hasta septiembre de 2016.


Pérez Juste desarrolló en la UNED el área en la que obtuvo la cátedra: Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación (área MIDE), que tiene encomendada la docencia y la investigación en un conjunto de materias relacionadas con los métodos de investigación y diagnóstico, con la orientación en sus diversas modalidades y manifestaciones y con la pedagogía diferencial. Cuando llegó a la UNED, los estudios de Pedagogía estaban insertos en la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación. Enseguida fue nombrado vicedecano de dicha facultad, para pasar a presidente de la Sección de Ciencias de la Educación en 1986. Luchó denodadamente por la independencia de la sección de Ciencias de la Educación, hasta conseguir una facultad propia en 1987. En 1994 fue elegido decano de la Facultad de Educación de la UNED, cargo que dejó en el 96 al ser nombrado vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado (1995-1999).


Fuera de la UNED, y entre otros muchos, desempeñó los cargos de vicepresidente del Consejo Escolar del Estado, consejero del Consejo Escolar del Estado; presidente de la Sociedad Española de Pedagogía; presidente de la Sección de Calidad de Educación de la Asociación Española para la Calidad (AEC); presidente de la Asociación Interuniversitaria de Investigación Pedagógica Experimental (AIDIPE); vocal de la Comisión Evaluadora del Área de Psicología y Ciencias de la Educación del Programa Nacional de Promoción General del Conocimiento y del Programa Nacional de Socioeconomía de la Dirección General de Investigación del Ministerio de Ciencia y Tecnología, y experto de la Comisión del Programa de Humanidades para el Plan Nacional I+D+I del Ministerio de Ciencia y Tecnología.




Canal.UNED: Vídeo del acto




COMUNICACIÓN UNED: Galería de imágenes


Homenaje póstumo a Ramón Pérez Juste (23/10/18)


Itziar Romera

Fotografías: José Rodríguez

Edición web: Elena Lobato

Comunicación UNED