La Facultad de Derecho entrega los XVII Premios García Goyena y rinde homenaje a los profesores jubilados

En el acto se recordó a la profesora Paloma García Picazo, recientemente fallecida

La vicedecana de Investigación y Transferencia, Mónica Herranz, fue la encargada de dar lectura del acta por la que se nombraba a los ganadores de la XVII edición de los Premios García Goyena. A la convocatoria se presentaron más de 40 trabajos, todos ellos relacionados con la temática establecida para la ocasión, Desafíos del siglo XXI en España, de los cuales el decano de la Facultad de Derecho quiso destacar “la gran altura científica y la indudable trascendencia social de los asuntos abordados en ellos”. Además, Díaz Martínez se mostró “feliz” porque todas las galardonadas este año han sido mujeres y añadió que los trabajos premiados se publicarán en la revista de la Facultad.

El decano quiso tener unas palabras de reconocimiento para los profesores jubilados que recibían la placa honorífica en el acto. “Han sido 12.775 días de trabajo y esfuerzo. ¿Qué palabras pueden agradecer tanto compromiso y dedicación? A mí sólo se me ocurren dos: Orgullo y Agradecimiento”. “Si nos resulta tan difícil deciros adiós”, añadió, “será porque ha sido un placer teneros a nuestro lado”.

Laudatios y agradecimientos

Los profesores de la Facultad de Derecho que se han jubilado este año recibieron su placa conmemorativa de manos del rector de la universidad y, a continuación, pudieron escuchar de parte de sus compañeros unas palabras de laudatio a su persona, tanto en el plano personal y profesional. Unas palabras llenas de orgullo y compañerismo que los homenajeados recibieron con emoción y agradecimiento.

En primer lugar tomó la palabra el profesor del Departamento de Derecho Constitucional, Pedro Tenorio Sánchez, para hablar sobre su compañera la profesora Maria Victoria García-Atance García, de quien destacó su “extraordinario sentido del humor y tesón” y a la que definió como una “excelente compañera”. Igualmente, hizo referencia a la proyección internacional de su trayectoria profesional “sobre todo en Latinoamérica y distintos países de Europa” y su estrecha colaboración con universidades alemanas y holandesas. Por su parte, la profesora García-Atance se mostró agradecida después de “43 años detrás de 4 letras (UNED) que me han acompañado durante más de la mitad de mi vida”.

De izda. a dcha.: Victoria García-Atance, Regina María Pérez y Ricardo Pradas

María Dolores Sánchez González, profesora del Departamento de Historia del Derecho y de las Instituciones, se encargó de la loa a la profesora jubilada Regina María Pérez Marcos. Ambas, unidas por más de 30 años de compañerismo y amistad, recordaron su camino conjunto en la UNED. De ella destacó “su incansable búsqueda de nuevas formas de docencia”, así como “su alta calidad humana”. Pérez Marcos afirmó que esa trayectoria de más de tres décadas le había hecho “crecer tanto en el plano intelectual como en el académico y humano” y aseveró que “he dado mucho, pero recibido aún más”.

Por su parte, Ignacio García-Perrote Escartín, profesor del Departamento de Derecho de la Empresa, subió el estrado para homenajear al profesor Ricardo Pradas Montilla, quien fue “pionero en preocuparse por lo que las instituciones europeas podrían decir en materia laboral, algo que hoy en día es esencial y condiciona toda regulación”. Por esto y otros numerosos motivos, García-Perrote no dudó en afirmar que Pradas “ha sido y es uno de los abogados especializados en Trabajo y Seguridad Social más importante de España”. Pradas Montilla se despidió de la casa con dos sentimientos: “agradecimiento y reconocimiento”. “Agradecimiento por la comprensión y el afecto que la UNED nos ha mostrado siempre a mí y a mi familia” y reconocimiento por una universidad “que merece la pena”. “Desde que entré”, reconoció, “me prometí ser merecedor de los valores que la caracterizan”.

De izda. a dcha.: Pedro Tenorio, María Dolores Sánchez e Ignacio García-Perrote

Homenaje póstumo a Paloma García Picazo

Para finalizar el acto, las profesoras Concepción Escobar Fernández, directora del Departamento de Derecho Internacional Público, y Teresa San Segundo Manuel, directora del Centro de Estudios de Género de la UNED, se acercaron al atril para rendir homenaje póstumo a la profesora Paloma García Picazo, destacada experta en Relaciones Internacionales e impulsora junto a San Segundo del Máster en Estudios de Género de la universidad, puesto en marcha en el presente curso académico. Escobar señaló que este homenaje sólo era el preámbulo del acto oficial que se celebrará más adelante en memoria de la profesora, a la que definió como “una mujer transparente, generosa en los personal y en lo académico, una universitaria cabal tanto en el ámbito docente como en el investigador” cuyos trabajos “son un referente obligado para juristas y expertos en Relaciones Internacionales”.

Por su parte, San Segundo se dirigió directamente a García Picazo, reconociendo “qué difícil se hace tu marcha, Paloma, qué difícil no poder charlar contigo”. Para definir a su compañera y amiga, la profesora utilizó diversos calificativos: “memoria portentosa, erudición en infinitos campos, gran inteligencia, cultura renacentista, sin parcelar; postura ética digna de admirar. Fuerte, valiente y sabia, una persona excepcional”. A modo de conclusión, San Segundo relató que “nuestro último libro juntas habla de los que se atreven a SER –así, con mayúsculas- a ser de verdad, algo que definía a Paloma”.

Concepción Escobar (izda.) y Teresa San Segundo

Ricardo Mairal fue el encargo de dar por concluido el acto dedicando unas palabras al carácter “genuinamente universitario” del mismo al unir en él “Academia, Reconocimiento y Humanidad”. “Los universitarios debemos ser exigentes porque así nos obliga la sociedad, y a esa exigencia responden los Premios García Goyena, que durante 17 ediciones han apostado por las nuevas vías de investigación en el ámbito jurídico, dando así respuesta académica a los desafíos de la sociedad”. “Pero”, continuó el rector, “además de ambiciosa, la universidad debe ser sensible a los individuos, y así demostramos serlo cuando reconocemos el trabajo de los profesores jubilados, a los que damos las gracias por ostentar las credenciales del Magisterio y por el orgullo de ser UNED que se desprende de sus palabras”. “Finalmente”, concluyó Mairal, “la UNED da muestra de su humanidad rindiendo homenaje a la profesora García Picazo”. Al respecto, Mairal afirmó que “todos los hechos que nos rodean forman parte de un todo que se desvirtúa si los vemos de forma aislada. Con las intervenciones de Paloma, el mundo se hacía más comprensible”.

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Itziar Romera

Fotografías: José Rodríguez

Edición web: Óliver Yuste

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