El alumno debe demostrar en la evaluación de la materia que ha superado los conocimientos y es capaz de mostrar la habilidad necesaria y la capacidad adecuada para enfrentarse con un texto, reflexionar, analizarlo y comunicar por escrito correctamente y con claridad sus ideas sobre el mismo; tanto en lo relativo a lo ideológico como a lo estilístico. La evaluación estará basada en dos pruebas presenciales
Pruebas presenciales
La evaluación se hará mediante dos pruebas presenciales. La primera tendrá lugar en la convocatoria de febrero, correspondiente al primer bloque de la asignatura (temas 1 a 7), y la segunda, en la convocatoria de junio, sobre el segundo bloque de la asignatura (temas 8 a 14).
Cada prueba constará de tres preguntas. Una de ellas consistirá en un comentario sobre un texto propuesto, que además de a sus aspectos temáticos y formales, podrá referirse a su relación con el contexto literario, artístico, histórico, etc. en que fue creado. El texto será elegido entre los incluidos de la crestomatía de cada autor en el curso virtual. La segunda pregunta se referirá a algunos de los contenidos del programa de la asignatura. Y la tercera pregunta tratará sobre las obras de lectura obligatoria. El examen constará de dos opciones a elegir una. Para aprobar el examen deberá contestarse a las tres preguntas, pues su evaluación será conjunta, habida cuenta de la coherencia íntima entre los contenidos que el/la alumno/a ha de superar y las destrezas prácticas que debe adquirir en el aprendizaje de la asignatura. Igualmente, habrá de obtenerse como mínimo, un resultado de 5 puntos.
EN EL EXAMEN PRESENCIAL NO SE PERMITIRÁ EL USO DE NINGÚN MATERIAL.
Para superar la asignatura, será necesario obtener un mínimo de 5 puntos (sobre 10) en cada una de las pruebas presenciales (febrero y junio). La nota final de la asignatura resultará de la media de las dos Pruebas Presenciales (junio y septiembre).
Criterios de Evaluación.
La calificación de la prueba presencial será el resultado de la aplicación de unos criterios de evaluación, donde, además de considerar el conocimiento de los aspectos teóricos y prácticos de la asignatura, se valorarán, asimismo, otros que también intervienen en la realización de esta prueba, como:
La corrección ortográfica, incluidos los acentos y los signos de puntuación. Expresarse sintáctica y ortográficamente de forma correcta es indispensable para aprobar la asignatura.
La claridad expositiva a la hora de redactar los argumentos.
La adecuación al temario.
La demostración de que se conocen los contenidos de la asignatura.
La capacidad de síntesis.
La capacidad de reflexión crítica sobre los contenidos estudiados.
La capacidad de relacionar los textos literarios leídos con los aspectos teóricos estudiados.
